A casi un mes de su trasplante cardíaco, Miguela Ayala (11) recibió hoy el alta médica y vivirá en un albergue cercano al hospital Pediátrico “Acosta Ñu”, gestionado por el Departamento de Servicio Social del centro asistencial, en donde la niña, en compañía de su madre, quedará para cumplir con el proceso de adaptación post quirúrgico, según divulgó el Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social.

“Iporã, ha oivaírõ japintátante”, fueron las palabras de Miguela al ser abordada sobre cómo se sentía al recibir el alta médica.

Miguela 2La Dra. Nancy Garay, jefa del Departamento de Cardiología del Acosta Ñu, indicó que ahora la pequeña Miguela se encuentra en un proceso de adaptación fuera del hospital y consideró importante que se mantenga cerca para cumplir sin inconvenientes, con las visitas semanales en el servicio de cardiología.

Por otra parte, el Dr. Marcos Melgarejo, cardiocirujano de este centro asistencial para niños/as, comentó que los trasplantes cardiacos dejaron de ser hechos ocasionales y/o fortuitos, haciendo referencia a que desde el 2012 hasta ahora se efectuaron ocho trasplantes.

Al mismo tiempo, destacó que la continuidad del programa de trasplante cardiaco y las campañas de concienciación sobre donación de órganos permiten beneficiar a niños/as de escasos recursos  y a acceder a medicina de alta complejidad.

Alianza Público – Privada

El Dr. Pio Alfieri, director del Acosta Ñu, agradeció a la Fundación “Santa Librada” por el apoyo que brinda a pacientes en planes de cirugías de alta complejidad, aún después de obtener el alta médica. Precisó que acciones como las brindadas por “Santa Librada”, se ven inclusive en países de primer mundo.

Recordando, luego de concretarse la donación del corazón para Miguela, la niña entró a cirugía a las 21:50 del lunes 9 de febrero pasado y salió de la sala a las 04:45 del martes 10 de febrero.