La Secretaría del Ambiente, a través de la Coordinación para la Recuperación del Lago Ypacarai, encabezado por la Lic. Paola Rodolfi, realizó la instalación de un segundo biodigestor en bidón de tamaño unifamiliar. Ésta vez fue en la Escuela Básica Nº 7838 «26 de Febrero La Victoria», de San Lorenzo.

La escuela cuenta con buenos antecedentes en cuanto a iniciativas amigables ambientales, es más, todo el centro educativo está hermoseado con materiales reciclados, como llantas en desuso, botellas, latas, etc. Además cuentan con tachos clasificadores de basura.

El objetivo de instalar biodigestores en entes educativos de la cuenca del Lago apunta a reforzar el componente educacional en cuanto a la conservación de los recursos hídricos y naturales en general, demostrando la utilidad de este pequeño biodigestor, de bajo costo y simple, como un aporte hacia la reducción de la contaminación del Lago Ypacaraí.

El día martes 5 de mayo, los alumnos y docentes de la Carrera de Ecología Humana de la Facultad de Ciencias Agrarias, estarán instalando el biodigestor con la participación de los alumnos y docentes, quienes recibirán una breve capacitación de uso del mismo.

¿Que es un Biodigestor?

Un digestor de desechos orgánicos o biodigestor es un contenedor cerrado, hermético e impermeable (llamado reactor), dentro del cual se deposita el material orgánico a fermentar (excrementos de animales y humanos, desechos vegetales-no se incluyen cítricos ya que acidifican-, etc) en determinada dilución de agua para que a través de la fermentación anaeróbica se produzca gas metano y fertilizantes orgánicos ricos en nitrógeno, fósforo y potasio, y además, se disminuya el potencial contaminante de los excrementos.

Un biodigestor se utiliza para la producción de biogás a partir de los residuos orgánicos. Como por ejemplo los restos de comida y jardín: pan, tortilla, huesos, cáscaras de huevo, frutas y verduras, café, pasto, ramas, flores, hojas, etc. Se consideran también orgánicos los residuos como servilletas, bolsitas y empaques de té, filtros de café y el papel de estraza (el de las bolsas de pan).

Los beneficios ambientales que ofrece la utilización del biodigestor son varios. Permite reciclar los residuos orgánicos, disminuyendo las emisiones del gas metano a la atmósfera, gas causante del efecto invernadero. Además reduce la proliferación de patógenos (agentes infecciosos), se eliminan malos olores y se protegen los recursos naturales de los mantos freáticos y aguas artificiales.

Al mismo tiempo, se produce energía renovable y sustentable a partir del biogás obtenido, y se reduce el uso de combustibles convencionales, como leñas, que durante su combustión produce gases y cenizas que afectan a la salud humana. También disminuye el uso del gas licuado de petróleo en garrafas y el uso del carbón.

En cuanto a los beneficios sociales que se pueden obtener son los siguientes: el bajo costo que requiere para la familia, ya que muchos de los materiales utilizados para su construcción pueden obtenerse en los mercados locales y en las fincas. Gran parte de la mano de obra la aporta la familia, el técnico sólo debe ofrecer la asesoría.

La Lic. Paola Rodolfi indica que es importante la difusión de los beneficios ambientales que nos brida está tecnología. “Sus resultados ya han sido probados con la construcción de los dos diseños diferentes, el biodigestor en polietileno instalado en la finca de Ypacarai, y el biodigestor tipo familiar en bidón instalado ahora en la Escuela Básica 26 de Febrero de la Ciudad de San Lorenzo. La difusión de esta iniciativa mediante cursos de capacitación y los medios de comunicación, es sumamente importante”, indicó.

La licenciada resaltó la importancia del apoyo de la ciudadanía para la recuperación del Lago. “Se necesita la cooperación de la ciudadanía y de los empresarios para adecuarse a las medidas ambientales y llegar así al objetivo principal, la recuperación del este patrimonio natural único”, finalizó.