Fotos: Jorge Vera y Daniel Maciel, enviados especiales, Radio 970 AM, Grupo Nación de Comunicaciones. 

El enfrentamiento que cierra la jornada sabatina y la primera fecha del grupo B de la Copa América entre Argentina y Paraguay, marcará el choque entre dos técnicos exitosos que debutan oficialmente con las selecciones que dirigen. Gerardo Martino, DT albiceleste, por un lado, ya con experiencia a nivel de combinados nacionales y Ramón Díaz entrenador albirrojo, por el otro, que ganó todo como jugador y como entrenador de su querido River Plate de Argentina, pero que tiene su primera incursión como seleccionador nacional.

El “Tata” hizo historia en Paraguay. Con un juego característico, de mucha presión alta y más efectivo que vistoso, la Albirroja alcanzó los cuartos de final de la Copa del Mundo del 2010 en Sudáfrica y, aunque ya en decadencia, fue vicecampeona de América cuatro años atrás.

Antes, había hecho escuela en nuestro país, consiguiendo títulos con Libertad y Cerro Porteño. La selección paraguaya fue bisagra para su trayectoria como entrenador, ya que luego de aquellos cinco años en los que estuvo en el banquillo nacional, dirigió Newell’s con el que logró un título en el fútbol argentino y llegó a semifinales de la Copa Libertadores 2013 y luego pasó a dirigir nada menos que el Barcelona español, con el que también logró un título: la Supercopa de España. A finales del 2014 fue nombrado sucesor de Alejandro Sabella en su selección y le tocará enfrentar en el inicio de la Copa América a la Albirroja, que le dio todo.

Por el otro lado, Ramón Díaz supo ganar todo con River Plate, como jugador y entrenador. Es el DT que más ha ganado en el cuadro millonario, alcanzando el punto máximo en 1996 cuando consiguió la Copa Libertadores de América después de 10 años de sequía para el club. Tras la vuelta del conjunto de la banda roja a la Primera División le dio nuevamente un título local y su personalidad, característica y éxito hicieron que sea el elegido por la Asociación Paraguaya de Fútbol como el encargado de reencauzar el rumbo de una selección que estaba en picada y sin rumbo. Le toca debutar nada menos que ante el combinado vicecampeón del mundo, una prueba de fuego para demostrar qué puede darle al fútbol paraguayo.

Fuente: www.lanacion.com.py