Con un sólido planteamiento, Cerro Porteño confirmó que la punta le sienta bien. Le ganó con suficiencia a Rubio Ñu, pese a que el resultado de 2-1 quedó corto. Con esto, el equipo del “Tiburón” Torres amplía su diferencia a 4 puntos en la cima y mete presión a su escolta, Olimpia, que hoy juega con Guaraní.

Cerro apuró de entrada al cuadro de Jacquet y muy temprano se hizo dueño de las acciones. Sin embargo, el tanto inicial llegaría tras un gran contragolpe iniciado por un quite de Alonso, que continuó Rojas, lo clarificó Cecilio Domínguez para Fabbro y este lo extendió, en una gran habilitación, a Ortigoza. La definición del goleador azulgrana fue aún mejor (toque sutil sobre el arquero).

El ritmo fue bueno, porque Rubio Ñu tuvo entereza y buen toque para crearle dramas a su rival, aunque sin éxito. El sector derecho del ataque fue otra vez la fórmula cerrista para madurar el segundo gol. Cecilio ganó el fondo y tras un centro que el arquero Heves no pudo cortar (podía haber hecho más), Ortigoza lo aprovechó nuevamente para poner el 2-0.

Parecía que Cerro podía más, pero bajó un cambio en el complemento y permitió el crecimiento de su rival que, sin embargo, recién sobre el final consiguió el descuento, que no sirvió de mucho.

Un “pinchazo”

Pese a su noche goleadora, José Ortigoza se retiró con un sabor agridulce. El delantero fue cambiado en el segundo tiempo luego de sentir un “pinchazo” en la cara posterior del muslo derecho, que al parecer no reviste de mucha gravedad. Pero como ahora habrá una semana de pausa por las eliminatorias, el delantero tendrá tiempo para recuperarse. El lunes será sometido a una ecografía para saber la gravedad.