El sábado pasado se realizó en el estadio Wembley de Londres una de las mejores peleas de este año. Se reventaron Nick Blackwell, el campeón británico de peso mediano y Chris Eubank Jr, el retador, quien ganó la lucha.

El árbitro había parado la batalla en el round 10, ya que el campeón ya no se sentía bien. Al bajarlo del cuadrilátero, lo subieron a un camilla, también le suministraron oxígeno.

Fue llevado al hospital Saint Marys de Paddington. Los médicos le diagnosticaron un derrame cerebral a causa de los golpes recibidos, por lo que fue inducido a un coma artificial. “Le pegué con algunos golpes importantes, talvez el árbitro debió haber parado la pelea antes”, declaró Eubank Jr.