CENTRAL. Eran cerca de las 9:30 de ayer, cuando las sirenas bomberiles recorrían las calles de Ypacaraí con destino al lago, donde un par de incendios amenazaban con extenderse cada vez más con los fuertes vientos que estiraban las llamas de un sector a otro. El primer servicio se realizó en plena zona céntrica, entrando a la ciudad de Ypacaraí en el predio del colegio Don Bosco, donde alrededor de tres hectáreas fueron rápidamente consumidas por el fuego, pero extintas por los bomberos rápidamente.

Sin embargo, el mayor laburo de los voluntarios fue en el kilómetro 45, camino a Ascurra (Caacupé), donde los amarillos, con apoyo de sus colegas caacupeños lucharon por más de cuatro horas para extinguir las llamas que nacían en la zona boscosa de la reserva del lago, según confirmó el capitán Horst Schutmann. En este sitio, el fuego se devoró poco más de 47 hectáreas, confirmaron los amarillos. “Básicamente a la par, en simultáneo tuvimos ambos servicios”, expresó Horts.

Por su parte, Rubén Valdez comentó que el laburo se vio un poco complicado debido a la fuerza que ejercía el viento que insistía en arrastrar el fuego hacia otras zonas, y amenazando con arrasar con todo el sitio. Horst señaló que aparentemente el siniestro se habría registrado por la influencia de los limpiadores o dueños de las estancias, quienes realizan quemas de basuras que terminan extendiéndose.