• PERSEVERANTE. Sus “hazañas” datan del año pasado, el mismo había sido pillado en dos oportunidades en el mismo lugar en Luque

SAN LORENZO. Dicen que “árbol que crece torcido, nunca más se endereza”, y por lo visto este viejo y conocido refrán se aplica perfectamente a un sujeto, quien aparentemente no puede ver moto ajena sin que le entre la “loca idea” de tomársela prestada y llevársela a casa.

Este es el caso de Alejandro Fabriccio V. S., de 30 años, quien por segunda vez en el año visitó la celda de la Comisaría 1.ª de la Ciudad Universitaria, y ¡otra vez por el mismo caso! Pero en diferentes circunstancias.

En su primera “pasada” por la dependencia (allá por julio pasado) dejó a muchos boquiabiertos al utilizar a su pequeña hijita de cuatro años como “distractor” en un supermercado para apoderarse de una motocicleta, aparcada en el estacionamiento del lugar.

Tras mironear y “asegurarse” que nadie lo vea, pero sin percatarse de los circuitos cerrados, hizo descansar a la peque en el asiento, para luego montarla e intentar salir huyendo. En la oportunidad sus intenciones se vieron frustradas por testigos, quienes lo atraparon.

En su nueva “hazaña”, el hombre -aparentemente cansado de andar a pie- vicheó una moto estacionada en una vivienda ubicada en el barrio San Juan, pero su suerte una vez más le jugó en contra, siendo pillado in fraganti cuando intentaba “levantar” la moto, propiedad de Víctor Álvarez.

Cuatro antecedentes

De acuerdo al informe policial, el hoy detenido cuenta ya con cuatro antecedentes, entre ellos dos por hurto que datan del 2003 y 2016, uno por hurto agravado del 2016 y otro por reducción del 2015.

Compurgó penas

Alejandro habría “liquidado” sus cuentas con la Justicia en agosto pasado; sin embargo, por dos causas que le pesan cuenta con prohibiciones varias como salir del país, portar armas y darle al chupi.

Intentó robar en el mismo lugar

Lo llamativo de este personaje es lo perseverante en la “tarea” inconclusa de llevarse una moto, ya que sus “aventuras” datan mucho antes de este año, y en abril del 2015 el mismo había sido captado por las cámaras de circuito cerrado de un supermercado ubicado en Luque, hasta donde había llegado por segunda vez en menos de una semana.

El escenario fue el mismo en aquella oportunidad, donde el 28 de marzo se alzó con un biciclo, pero no contento regresó el 1 de abril para apoderarse de otra. Pero no contó con la astucia de los responsables del lugar, quienes ya lo tenían marcado, siendo detenido en flagrancia por agentes de la 3.ª Central en su segunda visita.