- ASUSTA. El manequí “Pascualita” está en una tienda en México. Dicen que cobra vida propia. Hasta fue objeto de investigación
En una esquina de la avenida Ocampo de Chihuahua, México, hay una tienda de novias donde un manequí tiene vida propia. Al pasar podés ver a la novia viviente que está detrás del cristal con el rostro serio. Al volver puede ser que te sonría.
El manequí guarda la leyenda de “Pascualita” o “la Chonita” y se ganó con el paso de las décadas el estar en los primeros puestos entre las leyendas mexicanas. Su origen es confuso. El maniquí fue traído de Francia, comprado por la dueña del negocio “La Popular”, la señora Pascualita Esparza Perales de Pérez.
Desde el primer día, todo aquel que pasaba ante el exhibidor se quedaba maravillado por la belleza del maniquí, que no tardó en tener nombre propio. La dueña la nombró “Chonita”, porque había llegado a la tienda el día de La Encarnación, pero el populacho tenía más fuerza y acabó por ser conocida por el nombre de su dueña, “Pascualita”.
La cuestión es que el maniquí se convirtió en una especie de icono, teniendo en cuenta que los maniquíes de la época poco o nada tenían que ver con éste, realizado con sumo cuidado con cera, ojos de cristal y pelo de verdad insertado de forma artesanal.
Hasta aquí, todo entra dentro de lo normal y lógico, pero en algún momento inconcreto que podríamos situar en la década de los sesenta, comienzan a circular rumores en Chihuahua sobre “Pascualita” que van más allá de su belleza. Muchos testimonian que le vieron moverse o sonreír. Incluso, algunos van más allá y dicen que a la noche se pasea por la tienda.
Muchos aseguran que el espíritu de la dueña, fallecida en 1967, quedó encerrado en su querido manequí y allí sigue desde entonces, mostrándose solo en contadas y sutiles ocasiones.
Esta leyenda hizo que importantes canales de televisión hicieran reportajes y documentales sobre “Pascualita”, como TV Azteca y Televisa, además de canales latinos de Estados Unidos.
La popularidad del manequí ya dio muchos beneficios a la tienda, ya que se dice que la novia que se casa con el vestido que luce “Pascualita” tiene asegurado un porvenir feliz y sin apuros.
SERENATA
En varias ocasiones le llevaron serenata a “Pascualita” para que no se sienta sola.
MILAGRO
Una mujer que recibió un balazo en la calle justo delante de ella aseguró que fue “Pascualita” la que la salvó de la muerte y como agradecimiento le enciende velas periódicamente desde entonces.
LEYENDA
Otra versión de la leyenda cuenta que la hija de “Pascualita” falleció el día de la boda, justo cuando se encontraba ante el altar y que la madre, dolida y apenada por la pérdida, decidió embalsamar el cadáver, vestirlo de novia y tenerlo siempre junto a ella. Cuentan que las autoridades, incluso, llegaron a inspeccionar el manequí y reportaron que está hecho de cera y plástico.
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