LUQUE. Se pasa más de la mitad del día arrodillada y orando en su pequeño oratorio decorado con santos e imágenes religiosas. Afuera, mientras tanto, varias personas esperan su turno con entusiasmo para ser atendidas y tocadas por su mano. La mano de doña Estelvina Martínez, una médica ñana del barrio Maka’i, a base de oraciones y yuyos sana de muchas enfermedades, según comentan los que van a visitarla.

Pero no solo cura de alguna dolencia o aflicción. La mujer asegura que -una onda exorcista- ya liberó a ¡centenares de “endemoniados”! “La oración tiene poder. Esto es un don que Dios me dio”, dijo.

Expulsar demonios y enfermedades es su virtud. “Hoy en día la mayoría prefiere hacer el mal y hacen trabajitos para que los demonios se apoderen de otras personas. Yo los libero. Ya liberé a varios endemoniados, eso es lo que más hago hoy en día”, comentó. Según comentó, la expulsión de los “demoños” lo realiza con un ritual que dura 22 días.

Costo del ritual

“Llevamos a la persona hasta al arroyo Yukyry y en el agua hacemos el ritual. Todos sanan. Este ritual es para todo tipo de liberación y para curar enfermedades también”, tiró.

A la consulta si el “trabajito” de liberación tiene algún costo, doña Estelvina comentó que “la consulta es a voluntad, pero el ritual de liberación tiene un costo de 600 mil guaraníes. Tengo que cobrar así porque utilizo velas de 21 días que, si tenés suerte, se consigue a 120 o 130 mil guaraníes. Y utilizo tres después de hacer el baño en el arroyo” dijo y agregó: “Es más que nada para comprar eso. Pero el resultado siempre está”, he’i.

“La mayoría entran a los cuerpos por algún trabajo del mal”, he’i

Doña Estelvina comentó que existen dos formas en que el demonio se apodera de una persona. “Algunos directamente se encarnan en las personas. Otros (la gran mayoría) entran a los cuerpos de las personas por algún trabajo del mal que se les hizo. Esos son más fáciles de liberar con el ritual”, dijo.

“Cualquier cantidad de gente viene y piden su liberación. Y lo hacemos. Ya vi varios milagros, tanto en mi familia (sanó a su esposo y a su padre he’i) como en extraños que hasta ahora vienen a agradecerme”, comentó.

“Ni si me quieran pagar con oro, jamás haría un trabajo de payé”

“Muchos me dicen que soy bruja o payesera, pero no es así. Solo Dios es el que hace todo. En nombre de Él realizamos los trabajos”, explicó la médica ñana. “Nunca hice payé o algo por el estilo, ni si me quieren pagar con todo el oro del mundo, jamás haría un trabajo de payé. Todo lo que hago es para el bien”, comentó.