Cuando la emergencia llama, rápidamente ya escuchás a lo lejos el sonar de una sirena cruzando raudamente las calles de la ciudad de San Antonio para dar una asistencia al que necesite.

El que maneja ese móvil salvatore es José Pascale (56), uruguayo pero adoptado como un sanantoniano desde que llegó al país cuando tenía unos 16 años, cargado de ilusiones.

“Trabajé como soldador, mecánico y miles de cosas más, hasta que me tocó la oportunidad de manejar la ambulancia municipal. Necesitaban de manera urgente llevar a un paciente hasta Ciudad del Este y no estaban consiguiendo quien se anime y me llamaron. Desde entonces ya llevo 10 años al servicio de la ciudad”, contó.

Desde su lugar frente al volante fue testigo de muchas alegrías como de momentos difíciles y también tristes.

“Estar al mando de un vehículo de emergencias no es fácil por la responsabilidad de llevar vidas”, señala.

Ykua

Recuerda que cuando llegó a la ciudad, los vecinos le dijeron que si tomaba el agua del Ykua San Antonio ya no se iba a ir de la ciudad. “Acepté el desafío, tomé esa agua y al año siguiente me terminé casando. De ese día ya pasaron 26 años”, recuerda José.

El trabajo de ambulanciero es muy sufrido, cuenta. “Muchas veces tenés que lidiar con el trafico, nadie da paso a los vehículos de emergencia, pero -así también- la satisfacción es enorme cuando te dicen muchas gracias por la ayuda”, agrega el “Tío uru”, como se lo conoce.

De chofer a partero en ambulancia

José tiene miles de anécdotas manejando la ambulancia del centro de salud de San Antonio. Recuerda en particular una en que tenía que llevar una embarazada hasta el hospital de Capiatá.

“Iba la mujer y su marido en la parte trasera y de repente la mujer me dice que ya no soportaba el dolor. Paré la ambulancia, me puse unos guantes de goma y ni bien llegue junto a la embarazada ¡el bebé ya estaba saliendo! lLe pedí ayuda al marido y de repente se perdió con la impresión y salió corriendo, me dejó solo, y en cuestión de segundos una criatura nació en mis manos”, contó.

Tuvo que estudiar

Al principio le era difícil, pero gracias a que estudió primeros auxilios y siempre se capacita, ya sabe actuar mejor en cualquier emergencia.

Su mayor apoyo

Su familia siempre le está dando fuerzas, porque muchas veces te toca ver a personas que pierden la vida y no es sencillo sobrellevar eso.