ENCARNACIÓN. Todo un año se preparó Laura Brizuela para bailar en el carnaval encarnaceno. Avisó a medio mundo que iba a estar allí en el codiciado sambódromo, junto al club San Juan. Pasaron todas las carrozas, los camiones de trío eléctrico, las comparsas, ere eréa, y nadie le vio a ella. ¡¿Ha upéi?! Sus amigos, parientes y hasta algunos atajacarteras se preguntaron en los grupos de WhatsApp qué pasó con Laura Brizuela que no se le vio en la transmisión del SNT.

“Yo en ese momento me quería morir, no sé si de rabia o de qué, no sabés la impotencia que tenía. Quería llorar, pero me aguantaba. No sabés todo lo que uno se prepara para estar ahí y que justo cuando llegue ese momento te pase lo que me pasó es muy fuerte”, nos comentó la modelo esteña.

– ¿Y qué fue lo que pasó, Laura?

– Yo sé que la gente quiere buscar culpables. Ya escuché que hubo gente que dijo que fue mi culpa, que salí tarde de la pileta y que por eso me atrasé y me dejaron. A mí me llegaron tarde las ropas. Ya no me dio tiempo de llegar a tiempo. Hice todo el esfuerzo posible, no sé si se adelantó la salida o qué pasó, pero no esperé llegar y que ya hayan salido. Yo lo que les quiero decir a todos es que acá no hay culpable.

– Si no hay culpable, debe haber una causa de tu llegada tardía.

– Y la causa es la entrega de la ropa, pero con eso no quiero que se entienda que le estoy culpando a la diseñadora. Yo sé que ella tiene muchísimas ropas que tiene que terminar y entregar. Se ve seguramente presionada y sobrepasada también. Me entregaron muy sobre la hora el vestuario. Yo me preparé lo más rápido que pude. Incluso, tomé taxi para llegar más rápido. Me dijeron que si me iba en mi vehículo, entre buscar lugar para estacionar iba a perder más tiempo. Por eso fui en taxi, pero igual no alcancé.

– ¿Vos tenías que estar en una carroza?

– Yo tenía que estar en el trío eléctrico, acompañando a los músicos como modelo invitada. Cuando llegué ellos ya estaban a mitad del sambódromo. San Juan era el segundo club en salir y realmente fue todo muy rápido. No sé si se adelantaron las salidas o qué pasó. Yo llegué a las 10:30 y el comienzo estaba marcado para las 10:00. Igual, ya pasó. El próximo fin de semana voy a tener mi revancha.

– ¿Y qué hiciste cuando quedaste con tu traje, sin poder bailar?

– Me sentí terriblemente mal. Casi lloré. Agarré otra vez un taxi y volví al hotel para cambiarme. Me puse otra ropa y me fui a disfrutar del carnaval.

LLAMADAS Preocupación

Laura nos contó que todo el mundo le llamó después de no verle en el sambódromo. “Mi mamá me llamó preocupada. Pensó que me pasó algo. Muchos amigos siguieron la transmisión por televisión y me escribieron preguntándome por qué no bailé”, dijo.