• DESTACADO. El mediocampista tricolor será pieza clave en su equipo, que jugará la Copa Sudamericana

POR JORGE IZQUIERDO

Se dice que todo sacrificio tiene su recompensa. A veces hay que dejar de lado muchas cosas para conseguir lo que uno se propone en la vida y así lo entendió el pelotero de Nacional, Edgardo Orzusa (26 años), que abandonó su querida ciudad de Mbuyapey, desde muy pequeño, para venir a la capital y convertirse en futbolista profesional.

Edgardo tuvo que soportar estar lejos de su familia, pero la vida le sonreiría más adelante, porque gracias a su trabajo hoy en día sus padres tienen una mejor calidad de vida. El volante, uno de los referentes del mediocampo de “La Academia”, charló con Crónica y contó algunas cosas de su vida.

– ¿A los cuántos años viniste a la capital?

– A los 9 años tuve que dejar Mbuyapey. Vine a Luque a vivir con mi hermana mayor, porque quería ser futbolista.

– ¿Qué fue lo más duro que te tocó vivir desde que viniste?

– Dejar a mi familia, eso para mí fue muy difícil, lloré mucho cuando vine, extrañaba a mis padres. Después me fui acostumbrando, no tenía de otra.

– Con tu primer sueldo como jugador, ¿qué hiciste?

– Me compré un botín muy lindo, también un champión y un bolsón para llevar a las prácticas. Ahí se me fue toda mi primera plata.

– ¿Trabajaste antes, cuando practicabas?

– No llegué a trabajar, gracias a Dios tuve a mis padres que me ayudaron mucho. Mi papá hacía de carpintero y a la par trabajaba en la chacra, ellos me mandaban dinero para mi pasaje. Cuando empecé a ganar dinero les ayudé, ahora ya tienen una hermosa casa con todas las comodidades. Eso es lo que siempre quise para ellos y pude conseguirlo con mi trabajo.

– Al momento de debutar en la Primera División, ¿qué sensación tuviste?

– Fue como cumplir un sueño, algo maravilloso. Debuté ante el 3 de Febrero, jugué 20 minutos, parecía que no iba a terminar el partido. Estábamos ganando 3-2 con 9 hombres y había que aguantar. Por suerte se logró ganar.

En el momento de debutar, el que lo ayudó fue Inca

Edgardo también señaló al pelotero que más lo aconsejó en el momento de debutar con el equipo de Sol de América. “El día que iba a debutar, viene Inca (brasileño ex-Cerro) y me habló. Me dijo que si llegaba a entrar en el partido, que lo haga tranquilo, que lo escuche a él, que me va a guiar para saber ubicarme y hacer bien las cosas. Cuando entré él me dirigió en todo momento, fue un buen compañero, de él aprendí mucho”, dijo el volante.

Orzusa arrancó su camino en el fútbol en la escuela de fútbol de “Los Pibes” de San Lorenzo. Luego tuvo un paso por el club Tembetary, para después venir a la Sub 15 de Sol de América. Tuvo que esperar dos años para poder jugar, porque no era de la escuela de fútbol de Sol. Aguantó 2 años hasta empezar a jugar en la Sub 17. Con 20 años el técnico Jorge Campos lo hizo debutar en la Primera del cuadro danzarín.

12 Goles

La cantidad de goles que tiene Edgardo, 9 con Sol y 3 con Nacional.

1 Ídolo

A Orzusa siempre le gustó Zidane, por eso usa la 5 en Nacional.

El “gran salto” que le dé chance de ir al exterior

Una de las cosas que caracterizan a Edgardo es el sacrificio en cada partido. Y él lo sabe. Por eso, se siente cómodo con lo que le pide el profe Éver Hugo Almeida, a quien considera como un gran entrenador con el que espera, de una vez por todas, poder dar ese salto que le permita a futuro vivir de lo que más le gusta: el fútbol.

“Uno siempre sueña con que se dé una transferencia al exterior por todo lo que eso significa. Todos los días se trabaja tratando de dar lo mejor. Y si por ahí se puede llegar a dar, va a ser como un sueño más que se me va a cumplir”, tiró el rubito del mediocampo.

Sabe que en esta Copa Sudamericana que se viene tendrá la chance de “subirse” a un trampolín que lo ayude a dar el gran salto. Y, claro, más allá de lo que es ir al exterior, también está latente “tener de vuelta una chance en la selección, como cuando estuvo ‘Chiqui’ Arce”.