JAPÓN. Masaru Miura se apuñaló con un cuchillo de aproximadamente 13 centímetros en la zona de la cadera izquierda, cuando se encontraba en el baño de una estación del metro. Después de autoagredirse, Miura se dirigió a un puesto policial y presentó una denuncia falsa: “Un desconocido me apuñaló por detrás”.

Mientras los agentes de la Policía esperaban que Miura recibiera tratamiento médico por su herida, comenzaron a interrogar al hombre sobre el incidente para conocer más detalles. Finalmente, este admitió que había mentido y que se había apuñalado él mismo. Explicó que encontró el cuchillo en un matorral cerca de la estación del metro y que se lastimó porque no quería ir a trabajar. El hombre fue citado diciendo: “Pensé que si me lastimaba no tendría que ir a trabajar”.

El tipo estaba con angustia mental por cuestiones relacionadas con su trabajo.