Cuatro tipos que se dedican a los trabajos de estancia, no tuvieron la mejor idea de cerrar un arduo día de trabajo y salir a cazar. Lo loco de esta historia es que con escopetas en mano se internaron en un bosque que está en una zona roja ¡dominada por el EPP!, en Tacuatí. Tan brillante fue la idea que se toparon en plena oscuridad con una patrulla del FTC, que gracias al profesionalismo que tienen, primero los altearon y no los llenaron de plomo a los pobres prójimos.

Los que sí dispararon fueron los desventurados “mariscadores” pero en dirección contraria, corrieron a todo lo que daban sus piernas. Uno de ellos cayó en las redes de los milicos y este les relató que salieron a buscar animales silvestres para cenar, ya que hendy después de que terminaron sus tareas en la estancia, donde hacían trabajos de limpieza de pasturas. Así salvaron su pellejo.