Lo que faltaba, en horas de la madrugada unos infelices forzaron la puerta del kiosco solidario que se encuentra en barrio Jara, y se llevaron dos cocinas a inducción, una olla que se usaba para cocinar a los indigentes, y un parquecito que estaba también en el sitio.
Doña Nina Stewart, encargada, no descarta que los que robaron el sitio son gente que acuden diariamente a comer en el lugar porque sabían bien en dónde estaban las cosas. Agregó que lo más probable es que las cosas ya fueron cambiadas por drogas lamentablemente, pero la doña dijo que de igual manera seguirán trabajando para los necesitados.
Comentarios