Tengo 41 años y solamente conocí el amor con una mujer, 10 años menor que yo. Cuando mi esposo me dejó con mi segundo hijo en brazos, ya no quise saber nada del amor, hasta que hace 5 años me enamoré perdidamente de una chica de 22 años.

Una amiga me presentó a otra amiga y con esa me quedé. No te niego que pasamos bien, pero también muy mal.

Nuestra relación al principio era a distancia y cada 15 días, un mes nos veíamos, ella venía a mi casa, todo marchaba bien hasta que su familia se enteró de lo nuestro. Su mamá fue la que puso fin a nuestra relación, por decirlo así, prácticamente la obligó a dejarme.

Yo me enteré porque ella me llamó llorando, me dijo que la espere, pero yo ya no quiero saber nada de ella. Me dolió mucho, le dije que jamás le iba a perdonar que me abandonara de esta forma, después de todo lo que pasamos por estar juntas, los planes, las cosas que fuimos comprando de a poco.

Ella me dijo que no se hallaba, pero yo ya no quiero saber nada, porque sufrí mucho porque andaba a escondidas, ahora quiero una relación seria. Quiero una novia para presentarla a mis amigos, para salir, sin tener miedo a las miradas de los demás, alguien que no tenga miedo.

RENATA, DE LUQUE, 44 AÑOS

RESPUESTA: A veces las relaciones de pareja terminan a medias, se alejan pero nunca le ponen un punto final a la historia. En mi opinión deberías esperar, darle ese tiempo a tu pareja, si vuelve a conversar y tomar la decisión de una manera pensada no apresurada. Una vez que hablan y si deciden cerrar el capítulo de la historia pensar en tener otra pareja. Si mantuvieron la relación por tanto tiempo, hay que analizar si todavía hay emoción, sentimientos, pasión. Si desean formalizar o no, vivir juntos, tienen que hablar sobre cómo enfrentar los prejuicios y dejar de lado el egoísmo que no permite que se desarrolle el amor. Ambas se merecen estar con alguien que las ame y respete por sobre todas las cosas.