Sportivo Luqueño consiguió un gran triunfo ante Guaraní por 2-1 anoche, en un partido donde hubo de todo. Jugadas polémicas, un dudoso penal, expulsados etc.

En el primer tiempo cada uno tuvo “su momento”. Luqueño se plantó muy bien en el arranque, presionó en la salida y buscó llegar con claridad hasta el arco de Alfredo Aguilar.

A los 19’ Gerardo Arévalos, con golpe de cabeza, abrió el marcador para el conjunto que dirige Javier Sanguinetti.

Tras este tanto Guaraní se despertó y adelantó sus líneas. Pero fue más producto del cansancio de los hombres del chanchón, que virtud futbolística del equipo comandado por Daniel Garnero.

En los minutos finales el “indio” tuvo un par de ocasiones para llegar a la paridad, pero le faltó claridad en la puntada final.

En la complementaria el aborigen salió a buscar el empate y Luqueño apostó al contragolpe.

A los 22’ Joel Roa quiso enviar un centro al corazón del área, pero el balón se coló en el ángulo del arco aborigen. Fue el 2-0.

En ese momento parecía partido liquidado, pero no fue así. A los 36’ el árbitro sancionó un dudoso penal. Rodrigo Bogarín marcó desde los doce pasos y segundos después el juez expulsó a Juan Escobar. Pese a insistir hasta el minuto 95’ los de Dos Bocas no pudieron evitar la derrota.