• ENTREGADO. Era vocalista del grupo cachaquero “Rember” y dejó todo para cantarle a Dios y llevar una vida sin “descontrol”

“Mujeres, birra y mucho descontrol”, así es como describe su vida Richard Castillo Arce cuando era vocalista del grupo musical capiateño “Rember”, tan solo meses atrás. Las mujeres eran su debilidad, no tenía horario de salida y mucho menos de llegada, pero pronto algo pasaría que le daría un giro de 180 grados a su vida. Un día recibió una llamada de una de sus tantas aventuras. Esta le confirmaba que padecía de una enfermedad incurable de transmisión sexual. Al saber esto, él estaba seguro de que la había adquirido también, pero antes de hacerse la prueba decidió entregarse a Dios y prometió castidad hasta el matrimonio y cantar solo para Dios, si la prueba le salía negativa.

“En febrero me hice la prueba y por la gracia de Dios salió negativo, en tres meses más me volví a repetir y salió nuevamente negativo. Yo desde la primera prueba decidí cumplir mi promesa. Me entregué completamente a Dios, aproveché esta oportunidad porque realmente llevaba una vida muy promiscua, mi debilidad eran las mujeres”, relató a Crónica.

Desde febrero entonces es que él asegura que no ha mantenido relaciones sexuales con ninguna mujer y dice que se mantendrá así hasta que Dios le de una compañera de vida y se casen, ya que hasta ahora está solterito. “Yo canto en Paraguarí en una reunión cristiana donde se hacen sanaciones y liberaciones y también en mi grupo de célula (reunión de personas que oran). Dejé el grupo Rember también”, he’i.

Richard, dijo que quiere que su testimonio sea de ejemplo para muchos jóvenes que toman el mal camino. “La verdadera solución a nuestros problemas y el verdadero dueño de nuestras vidas es Dios”, dijo.

Vocalista del grupo

Por quince años Richard formó parte del grupo cachaquero “Rember”, donde aprendió mucho de música.

Muchas personas

Muchas personas que ven su transformación no pueden creerlo. Más todavía al recordar su pasado.

Aparecieron de repente muchos “hijos”, he’i

Richard aseguró que el 90% de los músicos son mujeriegos y se meten con las yiyis sin pensar en las consecuencias. “Este año aparecieron tres mujeres por ahí que dicen que soy padre de sus hijos, y estoy ahora en proceso de ADN. Yo me voy a hacer responsable de ellos si es cierto. Esta es consecuencia de mi vida pasada”, aseguró.

Comentó que tiene un hijo de 9 años con una española, con quien estuvo en una de sus giras por ahí y que lo estuvo descuidando mucho, pero que ahora se pondrá las pilas para responderle como tal.

Aparte que fue “sanado” de la mala vida que tenía, también Dios le libró de la diabetes, colesterol y un problema del riñón. “Tenía 96 kilos, no cuidaba mi salud y todo tenía que ver con la mala alimentación que llevaba y el consumo de alcohol”, he’i.

“Yo era mal hijo, con mis padres mi relación era todo un desastre”

Su relación con sus padres no era para nada buena, según comentó Richard. “Yo era mal hijo, con mis padres mi relación desastre era”, aseguró. Explicó que todo eso cambió, porque es Dios quien se refleja en su vida ahora. “Con uno de mis hermanos nos habíamos peleado hace años ya, le pedí perdón y todo y ahora nuestra familia está muy unida”, dijo.

Aseguró que no cambiaría por nada del mundo la vida que lleva ahora con Dios a su lado. “Ahora estoy buscando ayuda para formar un grupo cristiano para llevar el mensaje de salvación en todas partes donde Dios me envíe y contar mi testimonio. Quiero decirles que la solución está en abrirle a Jesús el corazón y dejar que transforme su vida”, siguió. Dijo que más adelante quisiera formar una familia, pero primero tiene que encontrar una buena candidata.