Wilder Fidelino Lescano, testigo y sobreviviente del atentando que se dio el miércoles en nuestra capital, declaró ayer ante la Fiscalía y contó que, tanto él como su sobrino -el menor que falleció en la balacera- vinieron a Asunción hace 4 días desde Pedro Juan Caballero y repitió una vez más que su primo tomó la drástica decisión de suicidarse al ver a su hijo muerto en el asiento trasero del rodado baleado.

“(Los sicarios) estaban esperando que nosotros lleguemos. Nos dispararon cuando llegamos a la casa. En eso William (su primo hermano) sale del lugar, mientras los disparos no paraban. Yo no vi la camioneta de atrás porque todo fue muy rápido. A una cuadra paró nuestra camioneta porque estaban destruidos los neumáticos. Mi primo se dio la vuelta, vio a su hijo muerto en el asiento de atrás y se pegó un tiro. Solo él tenía arma”, relató.

Recordando lo ocurrido indicó que vio cómo su familiar agarraba el arma para terminar con su vida. “Mi hijo está muerto, dijo él con una voz asustada. Ahí agarró su pistola que estaba en la guantera”, resaltó.

Contó que él y su sobrino pequeño, Gabriel Giménez (5), llegaron a Asunción hacía 4 días procedentes de Pedro Juan Caballero para estar con William Giménez Bernal (28). “Yo vine para cuidarle a su hijito. Mi primo tiene dos hijos. Él no confiaba en nadie como para contratar a otra persona como empleada, entonces vine”, dijo.

Hay antecedentes

Wilder confirmó que su pariente había sufrido un atentado hacía 6 meses en Amambay, pero que había logrado escapar hacia el Brasil.