El estadio de Cerro es la gran atracción, no solo para los cerristas, sino también para simpatizantes de otros clubes, que también quieren conocerlo.
Pero “no siempre se tiene lo que se quiere” dice un refrán, y algo similar ocurrió con algunas personas que llegaron desde Caazapá (según las informaciones), para visitar “La Nueva Olla”. El bus que los trajo estaba repleto y vinieron con la ilusión de entrar al estadio para curiosear un poquito, sacarse algunas fotos, etc.
Pero para desagrado de ellos, no se les permitió el ingreso y tuvieron que abordar de vuelta el bus y rajar del lugar. Olalá en todos los idiomas hikuái.
Hasta el momento, el renovado estadio de Cerro solo se abrirá cuando haya partidos ahí.
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