Universo 970 AM
En vivo
Universo 970 AM
Ahora suena
Radio Montecarlo
Ahora suena
HEi
Ahora suena
Radio Corazón
Ahora suena

Los “Campanas”: “Este trabajo nunca va a morir”

Los “Campanas”: “Este trabajo nunca va a morir”

No tienen seguro médico ni contrato laboral con ninguna empresa. Sus “patrones” directos son los choferes de los buses. La mayoría labura más de 17 horas al día. Su misión: informar a los choferes sobre los movimientos de los colegas de estos.

Están colocados en varias esquinas estratégicas de la capital y sus alrededores desde muy temprano con una plancheta, un bolígrafo y un reloj anotando cada vez que un micro circula por el lugar.

“Nuestra segunda casa es la calle. Yo estoy en esta esquina desde las 3:30 de la mañana hasta las 11 de la noche, horario en el que pasa el último micro por aquí. Llego a casa cerca de la medianoche, como algo, duermo dos horas y nuevamente ya salgo para venir a esta esquina”, comentó Benito Miranda (41), quien hace 8 años trabaja como “campana” de los colectiveros en la zona de Ñemby y con esta profesión mantiene a su familia conformada por su esposa y dos hijos de 4 y 6 añitos.

Es el sacrificio que hacemos porque lastimosamente no encontramos otro trabajo”, agregó. Como él, son varios los que se dedican a este laburo callejero. “En un buen día solemos hacer 60 mil guaraníes, y en mal día, ya sea por lluvia u otros motivos un 30 mil que solo nos alcanza para la comida”, dijo don Benito.

Este trabajo nunca va a morir. Ni el metrobús, ni el boleto electrónico, nada podrá con este honesto trabajo. Hace 20 años que estoy acá y así mantengo a mi familia”, dijo por su parte don Carlos Recalde (65). “En esta profesión hay que ser atento, porque un dato mal dado te puede costar que el chofer se enoje contigo y ahí perdiste”, agregó.

HACE 8 AÑOS. Don Benito mantiene a toda su familia haciendo de “campana” a los choferes.

Nosotros vemos de todo, somos testigos silenciosos”

Por mes, dependiendo de cuánto se trabaja “podés llegar a un millón y medio, pero no siempre se da. Si llegás a eso nderrikoitema”, dijo don Benito. “Los choferes necesitan de nosotros y nosotros de ellos, así nomás es esto”, agregó.

Comentó que un “campana” es un testigo silencioso de todo lo que sucede en su alrededor. “En la calle ya vi de todo. Moquete entre los muchachos, drogadictos que causan sarambi, accidentes, me tocó ayudar a borrachos que ya ni podían caminar, auxiliar a accidentados. La mayoría de estos casos se dan de madrugada. Nosotros vemos de todo y a veces nos toca hacer de todo, somos testigos silenciosos de muchas cosas (risas)”, tiró.

La manera en que se manejan

Los trabajadores de la calle, conocidos como “campanas”, no tienen ningún vínculo con ninguna empresa sino trabajan directamente con los choferes de los colectivos, quienes reciben la información de los horarios de otras líneas que tienen el mismo recorrido o incluso de los “punteros” de su propia empresa, para saber si apuran el acelerador.

Por ese importante dato reciben a cambio entre 1 mil y 4 mil guaraníes. “A veces el chofer está de buenas y te da 4 mil guaraníes máximo, pero a veces recibís solo mil’i, pero igual agradecemos de todo corazón. Todo suma”, dijo don Benito.

Compartir en redes

Comentarios

En vivo
Universo 970 AM
Ahora suena
Radio Montecarlo
Ahora suena
HEi
Ahora suena
Radio Corazón
Ahora suena
Crónica