Siempre estuve sola, sin familia ni nadie que me apoye. Conocí a un hombre que me prometió mucho pero no conozco la felicidad a su lado

Cuando tenía 14 años murió mi mamá y me quedé sola, nunca le conocí a mi papá y ella tampoco se volvió a juntar con nadie. Éramos muy pobres, ella lavaba ropa para mantenernos a las dos, así que me tocó salir a buscar trabajo poco después del funeral.

Sin nada, sin ayuda de nadie, entré a una casa de familia para hacer las tareas de limpieza, donde me daban comida y techo a cambio de que yo trabaje todo el día, algo me pagaban, pero poco.

Una vez la señora me maltrató porque se puso celosa por su marido y sin razón me echó de la casa. De nuevo sola y sin nadie decidí salir de mi pueblo a buscar alguna oportunidad de trabajar, ahí le conocí a un señor que tenía en ese entonces 57 años. Me dio un lugar donde quedarme a cambio de que le cocine y le limpie.

Los días transcurrieron demasiado rápido y él empezó a fijarse en mí, ya no como una simple empleada sino que me miraba como un hombre atraído por una mujer.

Me hizo muchas promesas hasta que me junté con él y tuve una hija. Hasta ahora vivimos juntos, pero no sé lo que es la felicidad a su lado.

Este señor me maltrataba mucho y ahora ya me cansé de él porque tiene enredos con polleras de aquí para allá, sus ex no dejan de molestar. Además tiene hijos de diferentes mujeres que vienen constantemente a quitarle plata o “vivirle”, y a mí me deja de lado.

A veces me pregunto qué pasará si le dejo, será que voy a encontrar un amor que me pueda querer y respetar porque esta mi pareja me dice todo el tiempo que yo no sirvo para nada, que no valgo ni un centavo. Se burla de mí porque no tengo familia ni una persona que me defienda. Decime, ¿qué puedo hacer?

MARTHA, DE ASUNCIÓN, 18 AÑOS.

RESPUESTA: Sos libre de vivir con la persona que deseas, si no estás a gusto tenés que pensar qué te mantiene atada a una relación marcada por el sufrimiento. Andar con alguien por costumbre, o por llenar un vacío no son razones suficientes, necesitás buscar una más fuerte. Soltarte del miedo, armarte de valor y empezar todo de nuevo, desde abajo, la vida es un constante cambio y tenés que ser consciente de eso. Eres una persona valiosa, dejá de lado los malos tratos, concentrate en tu calidad de mujer y madre, solo tenés que decidirte a cerrar un capítulo malo de tu historia y reescribir una más alegre. Fijate en las oportunidades que tenés para estudiar, trabajar y ser una persona independiente, sin necesidad de empeñar tu corazón. El pasado ya fue y no vuelve, te queda mirar hacia adelante donde tenés mucho camino por recorrer, acordate que la vida es larga para sufrir y muy corta para ser feliz.