PRESIDENTE FRANCO. Uno de esos casos sacados de película es el que se dio en la noche del pasado domingo. Dos hombres entraron a un comercio, aparentemente con la complicidad del guardia de seguridad, y pelaron el lugar, haciéndose con todo el efectivo.

Una vez que el “trabajo” terminó, decidieron que era el momento de repartirse el botín. Partido en tres partes “porcentuales”, cada uno siguió camino para disfrutar de la plata fácil.

Sin embargo, por el camino, otros “colegas” que por la pinta no están en el “sindicato de ladrones”, no tuvieron ni el más mínimo problema en ¡robar a los que robaron! Así como suena. Los mismos que habían dado el “golpe” fueron “golpeados”.

El único que se “salvó” fue el guardia de seguridad, que se dijo actuó en complicidad. Y como a él no le robaron, ¡le cayó la Policía! Tras un allanamiento, encontraron que efectivamente debajo de su colchón había billetes que pertenecían al dinero que se encontraba en la caja que fue asaltada.

Eso sí, de los ladrones que los robaron, no se sabe nada.