INGLATERRA. Luke Benham, quien llevaba dos años de relación amorosa con Rose, planeaba llevarla de vacaciones para pedirle que sea su esposa. Tardó varios meses en decidirse, y puso todo a punto el lugar y todo lo necesario para que sean unas vacaciones inolvidables.

Pero sus planes se fueron al tacho después de que comenzó a sentirse mal. Empezó a sentir fuertes dolores de estómago y vomitaba sangre.

Rápidamente fue al doctor a hacerse los análisis, y los médicos lo diagnosticaron con colitis ulcerosa crónica. Pero eso no es todo, el hombre iba a posponer unos meses más el viaje de vacaciones y la petición de manos. Aunque no pensó que el amor de su novia no era el mismo de lo que él sentía. La mujer le dejó porque no “quería ser su enfermera vitalicia”.

“Después de la cirugía, ella vino al hospital y me dijo que ya no podría estar conmigo, porque no quiere ser mi enfermera. Me dijo que era un ser querido maravilloso, pero que no podía con esto”, relató muy triste Luke.

Su dolor se profundizó cuando su exnovia comenzó a salir con su mejor amigo Tom, a quien Luke y su madre, Debbie, habían permitido en el pasado vivir con ellos. Pese a eso, Tom aclaró que no hizo ningún tesapo’ê, que la relación con Rose se dio luego de que ellos se dejaran.

“Fue una experiencia realmente difícil y me quitó la confianza en mí, pero al mismo tiempo no creo que sea así porque no es mi culpa”, dijo Luke, que ahora espera volver a la Universidad tras superar su dolencia.