MÉXICO. Esta mujer se llama Silvia Flores, apenas tiene 22 años, pero es muy viva. Acostumbraba ir a los mejores casinos de los municipios de Lerma, Metepec y Toluca, para conocer hombres, seducirlos y luego secuestrarlos con la ayuda de cuatro cómplices.
La mayoría de los hombres que caían en sus redes eran empresarios adinerados, y luego de ser detenida empezaron unas investigaciones, donde se descubrió que al menos uno de esos empresarios acabó muerto luego de que su familia pagó el rescate.
Comentarios