Increíble. Historias de todos los colores hay en el Mundial de Rusia 2018. La de este adicto al fútbol no podía faltar. El brasileño-mexicano Elias de Souza Aguiar llegó a Rusia con la “bicicleta más grande del mundo”, según él mismo lo bautizó.

Este viajero y no macana es amante del deporte rey y lleva a cuestas ocho mundiales. Desde México 1986 hasta nuestros días, solo se ha perdido el Mundial de Corea-Japón en el año 2002. Después, dijo presente en todas las competiciones con su particular biciclo, que por cierto, él mismo lo construyó.

Tiene una altura importante, y llama la atención. En Rusia, los turistas no paran de sacarse fotos con este personaje, que adornó su rodado con banderas de Brasil.

Pero atención, que en esta aventura no está solo. Lo acompaña su hijo Elias Júnior, quien desde Italia 1990 también se volvió un pasajero más de esta loca pero colorida travesía.

Estos aficionados ahorran lo más que pueden, y también reciben ayudas en el recorrido que hacen. ¡Qué calidá!

ORGANIZADOS

Elías padre se encarga de adornar la bici, mientras que su hijo lo comparte en las redes.