Se dice que cada pareja es un mundo, y es verdad. Cada persona es diferente, por lo que se entiende que si bien los problemas son comunes, la forma de resolverlos será distinto en cada uno.
Primero están las codependientes, son aquellas que ninguno logra funcionar sin el otro. Sienten depresión o ansiedad si no están cerca de su pareja, son capaces de cancelar una salida o viaje con amigos por estar con el otro. Las independientes son totalmente opuesto a lo anterior, en esta pareja se trata de dos personas completamente independientes que no saben o no están dispuestas a comprometerse y sacrificarse por la relación. Ambos están muy centrados en su carrera o sus propias vidas por separado. Las parejas abiertas, en este extraño tipo de relación ambos están comprometidos sentimentalmente uno con el otro, pero a la vez, poseen la libertad de acostarse con otras personas. Las tóxicas, la pareja posee una atracción extrema mutua, pero poseen costumbres, opiniones e integridad diferentes, lo que genera peleas constantes entre ambos. Lo peor, que no pueden estar alejados.
Unas sí, otras no
Muchas parejas que mantienen su relación a la distancia, funcionan, otras no. Al pasar el tiempo, ambos comienzan a sentir que se pierden importantes momentos en la vida.
Comentarios