El cacique Miguel Martínez, de la comunidad Ko’ê Poty, salió a defender la actuación del pastor Serafín Navarro, quien fue imputado por la Dirección de Derechos Étnicos de la Fiscalía, supuestamente por destrucción de objetos indígenas. “En ningún momento hubo atropello, como quieren hacer entender algunos. Yo consulté con todos y aceptaron. Tampoco se le obligó a la gente a participar en los cultos, todo fue con respeto”, tiró en un video levantado por el Portal de Curuguaty en Facebook.
Navarro se expone a una pena de hasta 5 años de prisión por los supuestos delitos cometidos durante una supuesta liberación de demonios a un anciano de 97 años.
Comentarios