BUENOS AIRES. La primera final de la Copa Libertadores de América entre Boca Juniors y River Plate fue una fiesta. Ambos equipos dejaron atrás las polémicas que se generaron tras la postergación del partido el sábado a causa de la lluvia y ofrecieron un espectáculo digno de una definición del torneo continental a nivel de clubes más importante.
El partido terminó empatado 2-2. Wanchope adelantó al Xeneize con un fuerte disparo. Pratto decretó el 1-1 parcial tras una gran definición. Y antes del final de la primera etapa Benedetto volvió a adelantar al dueño de casa.
En la complementaria, Izquierdoz en contra (de cabeza) puso cifras definitiva en un encuentro donde nadie especuló. A los 91 minutos Armani le sacó un gol cantado a Benedetto. La revancha se jugará el próximo sábado 24 de noviembre en el estadio “Monumental de Núñez”.
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