La cuadra de la Basílica de Caacupé se encuentra repleta no solo de feligreses, sino de comerciantes que encuentran en la fiesta mariana una oportunidad de ofrecer productos que les permitan el sustento. Avei, los devotos no escatiman en gastos cuando se trata de llevar un recuerdo de la Virgen Azul.
La oferta es variada e interesante. En nuestro recorrido pudimos encontrar que la guampa para el tereré con la imagen de la Virgencita es una de las preferidas.
“En 5 minutos tallamos la imagen en la guampa, a la gente le gusta mucho”, contó Eliodoro Candia, quien tiene su puesto fijo en las adyacencias de la Basílica. La guampa con la imagen de la santa cuesta 30 mil guaraníes.
“En esta semana vendí muchísimo”, agregó Eliodoro, quien además ofrece guampas hechas con tacuara. “Eso también se va mucho”, tiró.
La serenata contó con un gran apoyo de la ciudadanía
Como es costumbre en cada festividad mariana, el 6 de diciembre en horas de la tarde noche empezó la serenata que se rinde en honor a la Virgencita Azul. Muchos artistas dieron lo mejor de sí para que esto sea posible, y la ciudadanía los premió con fuertes aplausos.
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