Cuando parecía que por fin enderazaba el rumbo, Guaraní se comió dos palizas que dejaron sus huellas en el equipo, una ante Olimpia y luego ante Cerro. De hecho, en su última presentación en el torneo local, también terminó salvando apenas un empate ante Nacional.

Para colmo, en última presentación en el plano internacional ligó otro akãpete por la Copa Sudamericana, por lo que el chute de hoy ante San Lorenzo es más importante que un 20 mil’i en los últimos días del mes.

Uno de los entrenamientos más importantes se hizo ni más ni menos que en el estadio “Pascual Guerrero”, en Colombia, pensando en el “Rayadito”, ya que los tiempos no daban para la vuelta.

Mientras los dirigidos por Sergio Orteman tienen que remontar la mala racha por la que están pasando, porque lo que parecía ser un promedio bien mbarete ahora ya anda medio chalái, y una nueva “comida de hule” los va a poner directamente contra las cuerdas.

Eso sí, por el estilo de juego, más allá del resultado, la promesa de un partidazo está garantizada.

La clave para estar enchufados, he’i Valdez

El “Mudo” Diego Valdez está pasando por un momento de la gran siete en filas del “Rayadito”, al punto que hasta le valió una convocatoria a la selección nacional.

Pero el equipo no, por lo que sabe que la única manera de dejar atrás la mala racha es “buscar el partido. Es por eso que el trabajo de equipo es muy importante.

Venimos jugando bien y cuando tengamos las opciones de gol tenemos que estar más ordenados, con mucha comunicación”.

SOL-RIVER: Se tantean y buscan “la luz”

Sol de América, que hace más de un mes que no sabe lo que es ganar, y River Plate, que ligó un par de tovajepete en sus últimas presentaciones, se verán cara a cara en la tardecita de hoy en un duelo donde la necesidad de ganar es única.

Tras el traspié en la Copa Sudamericana, donde debutó con derrota (1-0 ante el Mineros de Venezuela), el equipo danzarín pondrá lo mejor que tiene buscando tres puntos que lo comiencen a despegar del fondo.

Mientras en filas del “Kelito”, el golpe que le dio Santaní fue muy fuerte y hasta si se quiere inesperado, lo que puso contra las cuerdas al entrenador Daniel Farrar, quien sabe que se le va acabando el crédito porque después de un arranque “cañón” se fue hacia el fondo. “Nosotros somos los únicos que podemos salir de esto.

Dejar atrás este momento en el que venimos de dos derrotas seguidas. Estamos trabajando en eso”, le bajó el entrenador.