De chicos, nuestros padres nos pedían que no habláramos fuerte ni hiciéramos ruido el Viernes Santo. Pero lo cierto es que el Miércoles de Ceniza y el Viernes Santo son días obligatorios de ayuno y abstinencia para los católicos.
Además, los viernes durante la Cuaresma son días obligatorios de abstinencia para honrar el sufrimiento y la muerte de Jesús y prepararse para compartir más plenamente y celebrar más apropiadamente su Resurrección.
En cuanto a abstinencia, se hace igualmente referencia a no tener relaciones sexuales, lo que para muchos implica mucho más difícil que ayunar.
Por ello, Crónica realizó una encuesta a cuatro cueronas, quienes nos contaron si son hacer abstinencia “de carne humana” en Semana Santa, o normalmente caen en la tentación.
Déjanos tus comentarios en Voiz