La creatividad es una característica que destaca en todos lados a Héctor Daniel Ortiz Falcón, un niño de 12 años, que sorprendió al rollo con su gran talento para la artesanía. El mitã’i artesano vive en el barrio Cerrito del distrito de Carmen del Paraná, departamento de Itapúa, en donde ya se volvió muy famoso voi. “Desde que él era chico le gustaban mucho las maquinarias, siempre dibujaba en su cuaderno todo lo que tenga que ver con tractores y motos”, aseguró doña Estela Falcón, madre del mitã’i valécho. El capo, pese a su corta edad, supo desarrollar el don, que ellos aseguran “le dio Dios”, para fabricar sus propios juguetes que van desde tractorcitos hasta camiones “tumba” superpurete. Cuando vuelve de la escuela, doña Estela contó que su hijito se instala directamente en su pequeño taller para seguir armando cuanto juguete se le viene a la cabeza.

“Nosotros le compramos para su juguete y si se descompone él arregla todo, o sino si que hace nomás ya de la madera”, he’i avei su madre. Lo que normalmente hace un mitã’i al volver del cole, es irse a disfrutar de sus amiguitos jugando un partido en la canchita del barrio, pero Héctor prefiere seguir haciendo lo que más le gusta, armar de todo con la madera. “Desde que yo era chico me gusta hacer esto, ya hice de todo”, aseguró el capo mitã’i. Doña Estela afirmó que todos en la familia se sienten ndaje muy orgullosos de contar y disfrutar de todo el talento de su pequeño hijo. “Sus hermanos fueron también así, pero él le dio más importancia y le sale mucho mejor”, he’i emocionada la doña.

Obra de arte era todo un secreto ra’e

Las obras maestras del pequeño Héctor había sido estaban guardadas bajo su silencio, ya que ni sus padres sabían de su talento. “Ni a nosotros nos contó lo que estaba haciendo, sabíamos que le gustaba, pero nunca vimos sus obras”, contó ña Estela. Tras llevar una de sus obras y mostrárselo a un profesor, tanto sus compañeros y familiares se enteraron del gran artesano que tenían muy cerca de ellos. “Su profesor le pidió más fotos de lo que hacía y ahí se enteraron todos”, he’i la doña. Tras apreciar la obra del pequeño valécho, su profesor ra’e publicó en las redes sociales en donde se viralizó y tuvo una gran repercusión.

SE PERDIERON

Doña Estela contó que lamentablemente algunas de las obras de su hijo se perdieron con el tiempo. “No pudimos guardar porque no sabíamos, pero ahora ya tenemos todos”, omombe’u.

HERRAMIENTAS
Tras mostrar su obra de arte, Héctor avei mencionó todo lo que falta para poder seguir creando sus propios juguetes, que después piensa vender. “Muchas herramientas me faltan”, he’i.

CON PINTURA
Después de viralizarse el talento de este pequeño artesano, doña Estela contó que ya tuvo avei ayuda de las personas solidarias de su zona. “Un señor le trajo pintura para terminar”, contó.