LONDRES. Rebecca Rushworth siempre soñó con armar un bar debajo de la escalera de su casa, un espacio que estaba vacío y que no sabía que podía hacerlo. Se le ocurrió la brillante idea de vender todos los juguetes que sus dos hijos ya no usaban, y con la plata que recaudaba iba a armar su tan soñado bar que le costó un dineral, ya que contaba con un glamoroso lugar para beber, un estante para vinos, un letrero de barra LED y vasos de cristal.

La mujer he’i en Facebook “estuve reflexionando sobre qué hacer con este espacio perdido debajo de mis escaleras desde hace un tiempo. ¡Estoy en Pinterest todos los días, y estos bares en casa seguían apareciendo! Así que era obvio que tenía que hacerlo realidad”, dijo la mujer quien avei compró para su rinconcito de bebidas luces de hadas y un letrero BAR iluminado.

Por supuesto que a los que no les agradó para nada la noticia fue a sus hijitos Sienna, de cinco, y Frankie, de tres años quienes se picharon y pidieron de vuelta sus juguetes ya que la madre lo hizo todo en secreto.