Olimpia sacó chapa de tricampeón en la complementaria y liquidó a un bravo equipo de Sol de América.

Complicado es poco. Sol de América se fue con todas las ganas de amargar a Olimpia en su “Bosque”. Encima, el equipo de Daniel Garnero estaba obligado a sumar de a tres porque antes Libertad había hecho lo suyo en Tuyucuá.

La primera parte se vio lo mejor de la visita, incluso tuvo chances claritas para anotar, pero se encontró con Alfredo Aguilar. El Decano, igualmente, por más impreciso que haya estado, creó oportunidades con Roque Santa Cruz, a quien se le negó el gol dos veces.

La complementaria fue otra película. Obviamente, Sol sintió el desgaste de la primera mitad y se metió un chiqui más atrás.

Olimpia, con un poco más de precisión, pero con más empuje, llegó al gol. De un rebote, Miguel Samudio la agarró de lleno, a lo Roberto Carlos, y fusiló a Centurión. ¡Golazo!

El lateral abrió el camino y comenzó a salir el “sol” para el Decano, porque en el descuento una corrida de Roque, como en la vieja época, iba a liquidar el expediente. El ídolo cruzó de zurda y al fondo para festejar con bailecito incluido un choque bravísimo desde el inicio.

PRIMERA RUEDA. Olimpia terminó con 26 puntos la primera rueda, puntero absoluto con dos puntos de diferencia sobre Libertad (24). Llegó ayer a su octava victoria en el Clausura.

Roque, ¡ídolo! dentro y fuera de la cancha

No solamente es un crack dentro de la cancha, también se destaca fuera de ella. Por gestos como el que hizo ayer, Roque Santa Cruz se gana la admiración de todos. Una aficionada que estaba en el sector de preferencias de Para Uno quería una sola cosa por su cumple, que le salude su ídolo.

Tras pedir a viva voz, el capitán se acercó a la fanática para felicitarla y darle una abrazo de cumpleaños. ¡Capo total!

Los péndex hicieron lo suyo en Para Uno

Por el lado de Olimpia, el juvenil Erik López fue de lo más destacado en Olimpia junto a Miguel Samudio. Tanto destaque tuvo que generar un akãrasy de aquellos a los jugadores de Sol, especialmente a Gustavo Velázquez y Aldo Vera, quienes le tuvieron que poner un “estate quieto” sobre el final.

En Sol, el péndex Luis Ortiz también mostró su capacidad. Fue una pesadilla para Otálvaro y Silva en los minutos que estuvo en cancha. Incluso fue aplaudido por la prefe de Olimpia al salir.