Cuando Fernando Fernández pilló que el cartel del cuarto árbitro marcaba su número para salir del partido, lo primero que le salió de la boca fue un “la put…” y con cara de pocos amigos miró hacia la banca de suplentes como diciéndole a Gustavo Costas ¿qué pio lo que hiciste?
Finalmente, el entrenador trató de calmarlo una vez que cruzó la raya de cal, pero el “Queso” no quería saber nada y se fue, dejándolo hablando solo. Redes, que ya había salido antes, siguió sentado mirando el partido sin calentarse.
Comentarios