Se resiste y persevera. Triunfa y sueña. Así se porta Santaní, que ayer le ganó 2-1 a Guaraní, para todavía aferrarse al sueño casi imposible de mantenerse en Primera División. Y por el contrario, el bajón aborigen se confirmó aún más con su tercera derrota al hilo, tras un repunte cañón, que por ahora, quedó lejos.

El “Indio” pintaba mejor al comienzo, pero opa upépe. El cuadro local, que estrenaba DT, una vez más, apretó onda tuerca y equilibró todo para luego, con la vieja confiable del centro, cabeza y gol, marcó la primera diferencia. El del cabezazo fue Hugo Espínola, tras un córner.

El equipo de Costas intentó reponerse, pero se expuso a algún gol más, por macanas de su defensa y un perdido Bava, de flojo rendimiento. Sin embargo, con un penal bien cobrado por el árbitro Gabriel Benítez, Claudio Aquino emparejó todo.

La alegría le duró poco, porque otro penal, también bien sancionado, le permitió a Blas Díaz marcar la diferencia para el local que, por ahora, sigue con vida.

“Estamos con vida y podemos salvarnos”, he’i

Para Blas Díaz, figura de Santaní, no todo está perdido. “Hablamos en la semana que no podía ser que estemos ahí, porque veníamos demostrando que podemos salvarnos. Hoy, nuevamente, digo que estamos con vida y que Santaní puede seguir en Primera. Hay que correr, hay que meter, porque la situación que estamos es difícil. Todos estamos metidos, nadie quiere descender y eso fue importante. Un envión anímico para continuar”, le bajó el volante.