INDIA. De todo hacen para llamar la atención de loperro que no quieren quedarse en casa, muchos se disfrazan para chulear las barreras, pero hay volái que usan también alguno que otro objeto para apalabrar.

Es el caso de un policía de tránsito, en Chennai, que tiene como objetivo diario hacer que los ciudadanos sean más conscientes de las medidas de confinamiento decretadas por el Gobierno, para frenar la pandemia de coronavirus.

Como buen “zorro” la tarea de Rajesh Babu es ponerse cada jornada su “terrorífico” casco, con forma de coronavirus, e informa de esta “guisa” a los transeúntes y conductores que pasan por su puesto de control, en una avenida de la capital del estado de Tamil Nadu, al sur del país.

El casco fue diseñado por un afamado artista local y fabricado con pasta de papel, tiene como objetivo disuadir a los ciudadanos de salir a la calle durante la cuarentena impuesta por el Ejecutivo del primer ministro Narendra Modi.

Es toda una sensación y no faltan las selfies para el recuerdo ndaje o para viralizar por las redes cuando toda esta epidemia pase. Lo cierto es que, sea por miedo o sea por curiosidad, todos atienden las indicaciones del agente Badu para cumplir con las restricciones. Pero el hecho de decretar un confinamiento total en el segundo país más poblado del mundo es un desafío titánico para las autoridades.

DESAFÍO. El Gobierno ordenó a sus más de 1.300 millones de habitantes que permanezcan en sus casas durante tres semanas para frenar la propagación del coronavirus. Es todo un desafío, algunos con palos le meten a los que no cumplen.