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QUERÍA SER MÉDICO, PERO PASARON COSAS

QUERÍA SER MÉDICO, PERO PASARON COSAS

No todo es pelota en la vida de Julio César Cáceres, quien en esta nota contó sobre el “otro sueño” que tenía cuando era una joven promesa deportiva.

  • POR ARTURO ROJAS

Los soñadores no pueden ser domados. Y vaya que es así en este caso. El “Emperador”, Julio César Cáceres, actualmente en Olimpia con 40 años, subió “a la máquina del tiempo” en esta nota con Crónica y habló de sus inicios como futbolista.

Entre otras cosas, contó que casi se metió en otra carrera, la del estudio, pero el destino quería otra historia.

“La verdad que valoraba mucho el trabajo que hacían los médicos, me gustaba y me gusta mucho eso, por ahí para ser doctor se necesita mucha disciplina y ni qué decir el apoyo económico de la familia. Pero como no teníamos muchos recursos era difícil llegar, entonces decidí meterme de lleno en el fútbol y me inicié en el Sportivo San José, y después se abrieron los caminos cada año”, expresaba Cáceres, con algo de añoranza hacia ese tiempo cuando comenzaba a hacer sus primeras armas en San José de los Arroyos, su tierra natal.

Julio Cáceres festeja el último penal de Mauro Caballero, el que le dio a Olimpia la tercera Libertadores en el 2002.

Así como muchos jóvenes compatriotas que quieren ser algo en la vida, Julio encontró en la pelota un escape que le cambiaría para siempre. “Desde chico ya comenzó mi amor por el fútbol, crecí en un ambiente donde se jugaba mucho y después que me hice un poco más grande, ya era un adolescente, me metí de lleno en esto, con muchas ganas de jugar, de entrenar, uno busca cumplir el gran deseo de llegar lejos”, aseguró.

Y así fue, ese chico de soñador, que al principio tenía ganas de ponerse la ropa de médico pero que la realidad no le ayudaba, no dejó de insistir y encontró su lugar dentro de un campo de juego.

¿BUEN ALUMNO?

Obviamente, Julio tenía que hablar también de su época de estudiante. “Si digo que era estudioso te voy a mentir, porque a lo mejor ya iba a ser médico”, contó entre risas.

Pero aseguró que “era muy dedicado, eso sí, lo justo para cumplir en la escuela y el colegio” finalizó el defensor, que igual “dio salud” a muchos “enfermos” del fútbol gracias a su exitosa carrera deportiva.

El recuerdo Mundial que lo emociona

Aquí Cáceres festejando con Nelson Cuevas el gol a Eslovenia.

Como todo futbolista, jugar por la selección nacional es uno de los principales objetivos. Y para Julio Cáceres no fue excepción ese sueño. Caceritos jugó tres mundiales con la Albirroja (2002, 2006 y 2010).

“Escuchar el Himno de tu país en la previa del partido de un Mundial es único, te hace acordar de tus raíces, de tu gente que está expectante de vos, del pueblo que está mirando ese partido. Es lo mejor que le puede pasar a uno, me daba piel de gallina y cuando recuerdo en la actualidad tengo esa misma sensación”, contó el ídolo.

El pequeño “accidente” tras cobrar su primer sueldo

Después de asentarse un poco más en el mundo Olimpia, el joven Julio César Cáceres estaba dispuesto a ser agradecido con un grupo de personas muy especial: la familia. Lo primero que hizo al cobrar su primer sueldo fue comprar cosas para la casa y cumplió, pero en el camino hubo un pequeño “accidente” que el “Emperador” recordó con mucha gracia.

“Le traje mercadería del supermercado a mi mamá, en ese momento no tenía vehículo y tuve que traerle en colectivo. Me acuerdo que la leche que compré se derramó todo por mi espalda porque compré en sachet y yo tenía que comprar en cartón, pero ehecháma, son anécdotas que se quedan para siempre” aseguró el ídolo, que después siguió ayudando a su familia, seguramente, sin leche derramada de por medio.

Lo importante es la actitud

Julio Cáceres fue capitán en casi todos los equipos donde jugó. Y obviamente también en la selección nacional, donde sigue siendo referente para los jóvenes.

“La verdad que nunca me preparé para decir que voy a ser capitán, pero sí me preparé mucho en el trabajo con dedicación y disciplina. Eso formó una personalidad diferente, y ahí te eligen. Eso es muy positivo para mí, quiere decir que le llego mucho a mis compañeros. La actitud siempre es importante para liderar los grupos, y también el ejemplo que uno da fuera y dentro de la cancha”, comentó.

Hoy, por más que no juega, es uno de los referentes en el plantel de Olimpia.

Todo gracias a los campeones

No podía faltar la sección donde Julio Cáceres hable de su Olimpia querido, con el que se consagró campeón de la Copa Libertadores del 2002 y actualmente es el único activo de esa camada.

Así recordó a sus compañeros. “Muchos de ellos fueron mis profesores, por así decirlo, me enseñaron muchas cosas y encima me tocó ganar la Copa con ellos, y la Recopa, eso fue lo máximo para mí”, dijo el experimentado defensor.

Por otra parte, así recordó esa campaña. “Era un equipo con todas las letras, dentro y fuera de la cancha, había experiencia y juventud, es inolvidable todo”, remató.

El drama con Riquelme ya está superado

Uno de los episodios que tuvo a Julio Cáceres en boca de todos fue justamente cuando estaba en Boca Juniors. Caceritos hizo polémicas declaraciones sobre Juan Román Riquelme, ídolo del club, y se armó una extensa novela.

Thiago Cáceres, actualmente en las formativas de la Franja.

“Lo que pasó, ya está, ya se dijo, no se puede borrar. Solamente esperar el tiempo, si fueron ciertas o no. Me tocó la oportunidad de cruzarme con él y hablamos tranquilamente, lo del pasado ya está. Tengo la tranquilidad que el día de mañana nos podemos encontrar y saludarnos y conversar de todo”, contó.

“Como papá, quiero que le vaya mucho mejor que a mí”

Asoma otro “Caceritos”. Julio Cáceres y su vida futbolera llevó a uno de sus hijos, Thiago David Cáceres (15), a correr también detrás de la pelota.

“Como papá, quiero que le vaya mucho mejor que a mí. Actualmente está en las formativas de Olimpia y deseamos que pueda tener la oportunidad de jugar en su momento, pero él tiene que hacer su parte”, contó el “Emperador”.

Así como su papá, Thiago también comenzó como volante y lo bajaron a la defensa. Pero hay una diferencia.

“Él es zurdo, ahora le pusieron como defensor y le suelo hablar mucho. No tuvimos la oportunidad de entrenar juntos, pero sí hablo bastante. Ojalá siga con ese deseo, que yo tuve, de llegar lejos”, finalizó el ídolo.

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