“A lo mejor no pasa de esta noche” se escucha decir a un doctor al familiar de un paciente en las afueras del hospital. La frase despierta dolor en la persona que recibe la noticia. Las lágrimas empiezan a correr las mejillas y antes que la garganta se inunde de angustia aparece un hombre quien entrega una tarjeta a la misma persona.

“Cuando escuchamos esa frase es una de las tantas formas en que nos acercamos y entregamos nuestras tarjetitas, sin ninguna mala intención. Solo para que nos tengan en cuenta en el caso de que esté precisando. Nunca lo toman de buena forma, pero después nos llaman. Es que simplemente estamos trabajando”.

El que habla es Enzo Daniel Cañete, quien se dedica a pescar “clientes” que pasan a la otra vida, frente al Hospital de Trauma. La ambulancia que maneja es conocida como “el camión de helados”. “Así le llaman”, confesó entre risas.

Enzo, al igual que muchas personas, son conocidos como los “pescadores de muertos” quienes ofrecen frente al Hospital de Trauma diferentes tipos de servicios a los familiares de las víctimas: servicios de ambulancias, servicios fúnebres, etc. El joven comentó a Crónica que en esta época de cuarentenna el negocio está en crisis.

“En el Hospital de Trauma estamos generalmente pescando casi las 24 horas al día, pero desde que comenzó todo esto de la pandemia hay poco trabajo, bajó muchísimo, un 50% te diría. Es que se restringió mucho y hay menos pacientes. Lastimosamente hay menos muertos”, dijo.

“Eso genera sentimientos totalmente diferentes, pero que se sienten al mismo tiempo. Primero alegría porque no hay fallecidos, pero a la vez siento angustia al no trabajar porque no sabemos de dónde vamos a sacar el dinero para mantenernos mensualmente”, explicó.

POR KILÓMETRO. El servicio de ambulancia área capital y central es de 180 mil guaraníes. “Si se lleva al interior se calcula el kilometraje que se va a recorrer con el paciente y se multiplica por 5 por kilómetro”, explicó el trabajador.

DESAPARECIERON. “El servicio de maquillajes al difunto, carrozas, servicios de mozo y otras cosas ya no se hace desde que comenzó la cuarentena, desaparecieron”, comentó Enzo, quien trabaja con la funeraria “Aurora”.

Hacen todo un “tour” para la “pesca”, dijo

“Si de repente no cae nada por el Trauma, vamos al IPS, por Clínicas, también vamos por los hospitales privados. En esta época hay que pescar por donde sea porque sinceramente nuestro trabajo bajó muchísimo”, dijo Enzo.

“Las personas nos tratan de buitres, de pescadores de muertos, y es cierto, por una parte se les entienden los términos que nos dan, pero el t rabajo que realizamos es una labor como un pescador cualquiera, esperando a que caiga una persona para que nosotros podamos acercarnos con los servicios, los precios y tratar de ayudar al familiar”, explicó.

“Siempre va a haber personas que necesiten de nosotros”

“Es nuestro trabajo con el cual le damos de comer a nuestra familia. No nos miren mal”, dijo. “Esta labor nunca va a terminar. Siempre va a haber personas que necesiten de nosotros”, añadió. “Sabemos que existe ese dolor y que a muchos que están de duelo les es chocante y comprendemos, pero solo queremos ofrecer un servicio que te pueda hacer un poco más llevadera la situación, siendo siempre respetuosos y comprensibles ante un momento muy doloroso”, tiró. Enzo comentó que ahora el contacto con los cadáveres es casi nulo. “En la morgue solamente nos permiten meter al fallecido en el cajón y directamente llevarlo al cementerio. No se puede formolizar, no se puede velar. Se trata que el contacto con el fallecido sea casi nulo”, finalizó.