En una nota con nuestro diario, “Chacho” valora lo hecho en el fútbol y de cómo supo administrar lo que ganó para montar un negocio familiar.

• POR JUAN VICENTE DUARTE

Hablar de los González Ferreira es hablar de apellidos ligados al fútbol. En este caso, Crónica pudo tener una charla con el mayor de los hermanos: Celso.

El “Chacho”, hoy retirado de la actividad, rememoró su carrera en los clubes que jugó y principalmente sobre un hecho para destacar: su gran facilidad para llegar a los goles, pese a ser un defensor.

“Fui un defensor goleador. Se podría decir que en Tacuary desarrollé esa virtud porque hacía goles continuamente. Creo que entre los defensores, el “Ganso” (Benítez) es el que más goles metió, luego viene Elvis Marecos y después vengo yo. Si mal no recuerdo, habré metido como 35 goles en mi carrera”, comenzó diciendo Celso.

Agrega que la forma de jugar de Tacuary, club donde pasó mayor tiempo como profesional, fue lo que facilitó que sea un jugador habitual en hacerse sentir en las redes. “Tenía más goles que los delanteros, era por la forma de jugar del equipo, nos hacíamos fuertes en las jugadas de pelota parada”, recordó.

Celso reconoce que viene de familia olimpista, donde hizo sus primeras armas, aunque fue en Guaraní donde pudo debutar en Primera. “De chicos, nos pasábamos rompiendo los floreros de mamá en casa. Mi papá era futbolero total, nos íbamos detrás de él a todos lados y como él nunca pudo debutar en Primera, su sueño era que nosotros lo hagamos. Los tres hermanos (también Julio e Iván) debutamos en Guaraní. El que me hizo debutar en Primera fue Rolando Chilavert en 1999 y a partir de ahí ya no paré”, subrayó.

Pero no todo le fue fácil a Celso y justamente esa parte difícil fue lo que determinó que decidiera pensar en el futuro y emprender algo paralelo al fútbol, que también te lo vamos a contar en esta nota.

EN PARAGUAY

Debutó en Guaraní, pasó por Tacuary, Libertad, Olimpia, Nacional, 3 de Febrero, Sportivo Luqueño, Carapeguá, Rubio Ñu y Capiatá.

EN EL EXTERIOR

Celso también pudo mostrar sus virtudes en el Paulista FC (Brasil) y el Carabobo (Venezuela), repartidos en dos temporadas.

Una ida fallida a Inglaterra que le hizo reflexionar sobre todo

Se dice que en las situaciones difíciles, uno aprende a valorar lo que tiene. Eso le pasó a Celso, al que le tocó vivir una mala experiencia en Inglaterra.

“Estuve tres meses allá, me llevó un empresario que me habló maravillas, pero la realidad es que pasé frío, hambre y eso después de todo lo que había ganado con Libertad y de haber estado en Olimpia. Fue muy difícil, pero nos sirvió para abrir los ojos y entender que el fútbol no es para siempre. Creo que eso fue lo que hizo para que decidiéramos abrir un negocio”, relató.

Olimpia, “un sueño cumplido”

Jugar por Olimpia fue para “Chacho” lograr llegar al lugar anhelado desde mitã’i.

“Yo cumplí el sueño de niño de jugar en Olimpia. Me había sacado una foto con Hugo Talavera y vestir esa camiseta era mi sueño. Lastimosamente no me tocó la mejor época”, refiere. Agregó que los problemas dirigenciales y peloteros evitaron que viviera una mejor etapa en el club.

“Cada semestre se cambiaba de plantel, había una dirigencia muy inestable y todo el mundo sabe que si en Olimpia no salís campeón, todo se complica. Con decirte que una gloria como Éver Almeida duró tres partidos como técnico…”, agregó.

Libertad le dio la posibilidad de gritar campeón dos veces

Dos títulos con Libertad marcan también la trayectoria de Celso.

“En Libertad me tocó conseguir el tri y el tetracampeonato y poder jugar la Copa Libertadores con Rubén Israel como técnico. Teníamos un plantelazo y casi no teníamos rivales en ese tiempo”, recordó.

En cuanto a los clubes de afuera donde jugó rescató la técnica de los rapais estando en el Paulista y “una buena etapa” en el Carabobo, que tiene una gran hinchada.

La buena inversión que dio sus frutos

Celso y su esposa (Diana Alen) decidieron invertir en una negocio hace años, que hoy por hoy representa el sustento para ellos.

“Gracias a Dios y como leí la otra vez lo de Ignacio Rolón, me tocó estar al lado de una persona muy sabia que supo administrar el dinero de los buenos momentos en el fútbol. Gracias a eso, hoy no paso necesidades. Abrimos un pequeño negocio de carteras y nos fue tan bien, que hoy tenemos varios locales en dos shoppings”, contó orgulloso.

Agregó que la decisión pasó por hacer una casa o hacer un negocio.

“Decidimos invert i r en eso, porque he visto y conozco casos de colegas que malgastaron su dinero en casas de lujo o autos y como ahora no tienen cómo subsistir, tuvieron que vender lo que tenían”.

“Para la edad que tenía, Roque ya era una bestia como jugador”

A la hora de hablar de un jugador al que le costó marcar, Celso no tiene dudas: Roque Santa Cruz.

“Lo marqué cuando estaba empezando y la verdad, para la edad que tenía, ya era una bestia como jugador”. Justamente en Inglaterra, a Celso le tocó volver a marcarlo y no le fue tan bien.

“Fue cuando fui a prueba a un club de Segunda y jugamos un amistoso con el Manchester City. “Si de joven ya me costaba marcarlo, ahí fue mucho más complicado”, concluyó.