Sabor a poco, porque no se pudo de local. Sabor a mucho, porque se enfrentó al líder del grupo y se sigue arriba con comodidad del tercero. Esas son las sensaciones que le dejó este partido a Guaraní, que claramente fue mucho más que un Palmeiras.

Pero estuvo difícil porque la marca pudo más que la creación y los que sabían siempre tenían que pasar primero por una muralla para después pensar en qué hacer. Y así se complicaba todo. Sobre todo con dos arquerazos frente a frente.

Por eso, la apuesta más bien pasaba por intentar algo de afuera. Menino fue uno de los primeros en tantear con un balazo que Servio sacó al tiro de esquina a los 11’. ¿La respueta? Llegó recién a los 39’ con Florentín, que por poco rompe el cero.

Solamente dos jugadas de peligro real por lo mucho que apretaron las marcas. Y ojo que el partido no fue malo.

Recién en el segundo se soltaron más, con un “Queso” que tomó protagonismo y a la vez hizo figura a Gustavo Gómez, que sacó todo.

Cecilio, en “modo Independiente”, después de un blooper tuvo una de cara al gol, pero la cruzó mucho y se fue. Tal vez, la más clara.

Pero el partido estaba condenado al cero, y así se fue. Eso sí, Guaraní fue más…, pero Gómez es del Palmeiras.

Merlini he’i que el 0-0 le dejó tranqui

Bautista Merlini, al f inal del chute, tiró que el duelo le dejó “buenas sensaciones por lo que es el rival que enfrentamos. Tuvimos oportunidades de ganarlo. Ellos casi no tuvieron chances, fuimos sólidos y estuvimos cerca. La verdad que muy conforme por lo que fue la presentación”.