El recordado Carlos Guirland, una máquina de contar anécdotas futboleras, pasó de todo detrás del balón

Por Arturo Rojas C.

@rojasarturopy

El nombre de Carlos Guirland (52) se asocia directamente con fútbol, magia, buen toque. Pero también hay garra, aguante y sacrificio detrás de su pasión por la pelota. En esta entrevista con Crónica, el misionero contó de todo, sus inicios, proyectos y su llegada al Olimpia desde el interior.

“No fue todo fácil en mi vida, cuando llegué al Olimpia, con 17 años, me tocó vivir y dormir bajo la gradería un tiempo con otros compañeros, arreglábamos unas camitas ahí, había un ventilador que cada media hora por ahí funcionaba y entre sudor y mosquitos se hacía lo que se podía para descansar.

Después de grande me di cuenta de todo ese sacrificio, porque en ese momento era joven, aguantaba todo, me daba igual y lo único que quería era despertarme y ponerme a practicar ya”, confesó el profe Carlos.

En la temporada 1986, Guirland llegó de San Ignacio Misiones con un pequeño bolsón, pero con grandes sueños. “La verdad que pensé que iba a quedarme para las inferiores, pero increíblemente me citaron para practicar con la Primera, después de una prueba que tuve por la mañana. Entré al vestuario para cambiarme, estaban todos los ídolos, yo parecía una mascota entre ellos de tan grandes que eran”, recordó entre risas el campeón de América.

En 24 horas, Guirland convenció al entonces DT Sergio Markarián. “Fue muy rápido todo como se dio, me sorprendió bastante, en un día aproximadamente ya estaba jugando en Olimpia”, contó.

Por último expresó, “puedo decir que llegué a lo más alto del fútbol gracias a Olimpia, aprendí muchas cosas ahí, me formé como jugador y persona”, finalizó el ídolo.

Lesiones, un karma para Carlos Guirland

Carlos Guirland era de esos jugadores que podían cambiar un partido en pocos toques. Delantero, enganche, volante, ere eréa, siempre cerca de la pelota. Pero, lastimosamente, las lesiones le jugaron una mala pasada.

“A los 20 años yo ya había superado lesiones feas de la rodilla, rotura de ligamentos cruzados tuve varias veces, eso me trabajaba bastante en lo emocional, me decían que no iba a jugar más y eso, opêmbarei kóa y eso decían por mí, pero igual salía adelante”, contó el profe.

El misionero jugó también en Sol de América y Universal, acá. Mientras que afuera jugó en Chacarita Juniors, San Martín de Tucumán, Mandyyú (Argentina), Audax Italiano y La Serena (Chile).

El pecado de muchos en esta época

Para Carlos Guirland hay bastantes recursos humanos en nuestro país en cuanto a fútbol. Pero “lo peor que pueden hacerle ahora a un futbolista que está sur giendo es darle todo, le miman, le dan auto, casa, departamento, pero no le dicen sus fallas y se acostumbra así”, apuntó Guirland.

“Están más pendientes de sus redes que del fútbol, se vuelven 30 por ciento futbolista y el resto cualquier cosa, cuando que si querés llegar lejos, tenés que ser 100 por ciento futbolista y profesional”, he’i.

“Mi sueño es tener un centro de formación técnica”, contó

Luego del fútbol, Carlos Guirland se metió de lleno en lo que es cazar talentos, formarlos y hacerlos futbolistas. “Yo no tuve formativas, me hice de futbolista practicando en casa, haciendo picaditas, eso me inspiró a enseñar a los jóvenes, a acompañarlos desde lo que sé del fútbol”, comentó el ídolo.

Por otra parte, uno de sus grandes proyectos es… “Mi sueño es tener un centro de formación técnica en Asunción, el manejo del balón, cómo debe ser, repetición de ejercicios, eso es lo que quiero formar en algún momento”, confesó Guirland.

“Quiero que mis jugadores den el máximo potencial”

Varios futbolistas aprendieron de Carlos Guirland. Por ejemplo, Gustavo Gómez, Ángel Cardozo Lucena, Jorge Recalde, Guillermo Beltrán, etc., etc. El formador, que es un verdadero maestro de la pelota, confesó: “Yo me retiré muy temprano y con 31 años creo que pude dar más, por eso quiero que mis jugadores den el máximo potencial, les exijo bastante para verles en lo más alto del fútbol”, comentó el DT.

Después, en cuanto a su trabajo de cazatalentos confesó. “No es fácil tener a jugadores, mantenerlos, muchas veces perdí más de lo que gané, pero me gusta hacer esto, quiero dejar mi huella en ellos de alguna forma”, remató.

MÁS DATOS

EN OLIMPIA

En total, contando dos ciclos, Carlos Guirland jugó siete años en Olimpia. En la temporada 1986 empezó su historia.

CAMPEÓN

Además de ganar varios torneos locales, Guirland fue parte del Olimpia campeón de todo en América en el 90.

LO DIJO

“LO ÚNICO QUE SABÍA AL LLEGAR A LA CAPITAL ERA QUE TENÍA QUE TOMAR EL 12 Y BAJARME CERCA DEL OLIMPIA”

CARLOS GUIRLAND

EXFUTBOLISTA