El expelotero  y actual técnico de fútbol, Cristóbal Cubilla, pide a los dirigentes de fútbol no olvidarse de los profesionales paraguayos. Dijo que existe sobrada capacidad para cualquier desafío.

• POR GERARDO BENÍTEZ MONGES

Cristóbal Cubilla Delgadillo es un expelotero que conquistó todo tipo de copas, tanto a nivel nacional como internacional con el Olimpia, en los años 1990 y 1991. Actualmente es técnico de fútbol y dirige al Guaraní de Santísima Trinidad, que se prepara para competir este año en la División Intermedia.

Recordó que, chutando a la pelota, dejó bien en alto al fútbol paraguayo; hoy día, quiere tener la oportunidad de dirigir un club de Primera, por lo que pide a los dirigentes de fútbol no olvidarse de los profesionales paraguayos. Por de pronto, su objetivo es conseguir la estabilidad de su equipo en este nuevo desafío que se llama la división semiprofesional.

“Como jugador he dejado bien en alto el prestigio del fútbol paraguayo; hoy día, en mi nuevo rol como director técnico, quiero tener la oportunidad de dirigir un club de Primera. Los presidentes de los clubes tienen que fijarse más en el profesional paraguayo, he cosechado cosas importantes, ahora debo debutar como entrenador, espero que los dirigentes recapaciten y reconozcan los méritos de los paraguayos”, le bajó.

Agregó: “Siempre uno anhela ser protagonista en el rol que le toca, hay que empezar de un equipo regular y seguir subiendo; no obstante, ahora mismo yo me siento capaz de dirigir a cualquier equipo de nuestro fútbol”.

COMO JUGADOR

Cubilla se inició como jugador en el Independiente de Campo Grande, posteriormente pasó a Cerro Porteño y luego de tres temporadas, a filas del Necaxa de México. De ahí al Once Caldas y en el 90 llegó a Olimpia como refuerzo. Ese año conquistó con la franja negra la Copa Libertadores, la Supercopa Sudamericana, la Copa Intercontinental, la Recopa Sudamericana 1991 y la Copa Interamericana 1991.

Listo para trancar en la Intermedia con Guaraní

Cristóbal Cubilla llegó al Guaraní de Santísima Trinidad, departamento de Itapúa, en el año 2019, ese año se consagró campeón, obteniendo el pasaporte para jugar en la Intermedia, en el 2020. Ese año, por la pandemia, quedó todo suspendido, por lo que ahorita, la preparación para dicho torneo está a full. “La meta es estabilizar al equipo en la categoría y después ver la posibilidad de escalar más; tenemos muy buenos refuerzos, más el equipo base con el que salimos campeón en el 2019”, contó.

Dijo que la incentivación de sus pupilos es grande y, por sobre todo, muy meritorio para la ciudad de Itapúa, que se vistió de fiesta cuando se obtuvo el campeonato.

“Yo le quería a don Luis Cubilla como a un padre”

El expelotero dijo que, en su larga trayectoria, aprendió mucho, tanto de sus compañeros como de sus técnicos. En ese sentido, destacó a dos grandes de aquellos tiempos. “Con Luis Cubilla y Cayetano Ré aprendí muchas cosas, me siento más que agradecido con ellos”, indicó.

Y hablando de don Luis Cubilla, recordó una anécdota que pasó con él. “Cuando estaba a punto de ingresar al bus que nos llevaría a la cancha a jugar contra el Barcelona, por Copa, un periodista me pregunta si era hijo actual de don Luis, él estaba dentro del bus mirándome, sin que yo me percate, yo le respondí al periodista, sí, soy su hijo legal, cuando le miro y él se ríe.