En un partido que tuvo dos tiempos muy distintos, el primero aburrido y el segundo mucho más movido, Libertad le ganó ayer a River Plate por 1-0 en el arranque de la 9.ª fecha del torneo Clausura.

Los primeros 45’ no fueron buenos… por parte de ninguno de los equipos y eso hizo que el “espectáculo” sea opaco y por momentos hasta aburrido. Es difícil entender cómo Libertad, casi con el mismo plantel que ganó el Apertura y con solvencia, no pueda levantar vuelo en este segundo torneo del año. El dueño de casa tampoco hizo mucho, en los primeros minutos insinuó cosas, generó un par de jugadas que entusiasmaron al técnico Celso Ayala y a los pocos hinchas del Kelito que estaban en el estadio, pero la ilusión se apagó muy rápido, fue prácticamente algo fugaz.

Desde fuera de la cancha da la sensación de que el Guma ya dio por perdido este campeonato y su cabeza está solo en la Copa Sudamericana, donde la próxima semana visitará a Bragantino en el primer juego por las semifinales.

En el arranque de la complementaria la visita golpeó duro a través de Rodrigo Bogarín, quien con disparo desde fuera del área marcó el 1-0. Este gol impactó en los jugadores de River, quienes por varios minutos no lograron reaccionar y cuando lo hicieron ya estaba muy apretados por el reloj.