Al parecer ahora sí el miedo al maldito virus ya se fue por completo y aunque no se fue del todo, el rollo empieza a festejar que la pesadilla terminó.

El cuidado extremo terminó y eso lo sienten en su mayoría las vendedoras de yuyos del Mercado N.º 4, quienes aseguran que por las ventas se dieron cuenta que el covid-19 dejó de importar. “Hace unos meses vendíamos todavía muchísimo el eucalipto, urusu he’ê y hasta el jarabe que nosotros preparamos para tomar si se enferman del covid. Ahora casi ya no vendemos eso”, detalló Carmen Amarilla, del “Paseo de los yuyos”.

Pero la crisis después de eso no les llegó, ya que se dieron cuenta que sus clientes cambiaron de opción nomás y ahora en vez de luchar contra ese virus ñarõ, el enemigo es el “ka’u ko’ê”.

La mujer, quien trabaja con todos sus familiares en la venta del “pohã ñana”, comentó que lo que más sale es el combo de remedios para el tereré con los componentes principales para luchar contra la “butifarra”, que no falta después de la farra. “Son los clientes de siempre y vienen a pedir combo para yerar. La gente empezó a farrear y saben bien que tenemos algunos yuyos, como el typycha kuratû, zarzaparrilla y hasta el ajenjo que limpia el estómago y les deja como nuevo”, detalló la mujer. Explicó que desde tempranas horas, y mayormente los lunes, en fila se van y piden el combo yerón por lo que después del fin de semana preparan para que a nadie les falte.

Pohã para los calmados y para “embotellados”

Doña Simeona trabaja también en el “Paseo de los yuyos” y contó que generalmente son los hombres los que se van a comprar los remedios para el tereré pantano.

Explicó que ya conoce a todos sus clientes y viendo todo lo que piden hoy en día sienten que todo está volviendo a la normalidad. “Da gusto ver todo eso, nuestros clientes que hace mucho ya no venían porque no podían más farrear están viniendo otra vez junto a nosotros. Nosotros sabemos lo que les hacen bien”, dijo la mujer.

Contó que preparan combo para los que toman un poco nomás y hasta para los que se pasan de la raya y le meten al chupi hasta quedar “embotellados”. “Para los que toman un poco nomás preparamos algo liviano, perdudilla, kapi’ikatî y un poco de agrial. Pero hay esos que exageran, solo con ajenjo se les pasa”, detalló la mujer.

Remedios están en “cháke” por sequía y calor intenso, aseguró

Por su parte Gladys Duarte, otra vendedora de yuyos, comentó que están un poco preocupados ya que el calor y la falta de lluvia les afectan mucho y los remedios yuyos empiezan a escasear.

“Se queman todo con tanto calor y está empezando a subir de precio también, no sabemos hasta dónde va a ir esto”, relató la mujer. Explicó que generalmente venden los yuyos a 1.000 guaraníes cada uno y hacen combos de 3 por 2.000, pero al parecer esto está llegando a su fin.

“Tenemos que dar a mil cada uno para poder salvar algo porque el remedio está subiendo demasiado ahora. Y si conseguimos es carísimo”, detalló.

Comentó que muchas personas venden los combos a cinco mil, ya que es la única manera de ganar un poco de plata ndaje.