Para ayudar a nuestras parejas a manejar los celos, es necesario reconocer que necesitan permanentemente un aseguramiento extra de nuestro amor por ellas, pero no dejemos de hacer aquellas cosas que amamos solamente por darle gusto.

Uno puede reasegurar nuestra dedicación hacia la relación hablando con ellos sobre el tema, pero bajo ninguna circunstancia debemos rendirnos y dejar de lado nuestros intereses por causa de su inseguridad. Parte del ciclo “posesivo” dentro de una relación tan tumultuosa es que uno de los dos miembros de la pareja ajusta su garra y el otro trata de alejarse cada vez más. Si ambos deciden dejar a un lado esa necesidad de control o ese deseo de alejarse, habrá mucho menos combustible y el fuego se irá apagando.

Algunas veces todo lo que una persona necesita para dejar de ser posesiva o celosa es un reaseguramiento de que es amada.

Los celos son sentimientos humanos, naturales, como la tristeza, la alegría, la preocupación y es hasta importante una pequeña dosis en la pareja como para demostrar que le importa al otro, pero sin que dé lugar a discusiones, ni largos interrogatorios, ni comentarios en doble sentido. La persona que aguanta que su pareja sea celosa sufre muchísimo. La realidad es que la base de toda relación es la confianza recíproca donde los celos no deberían tener mucho espacio cuando son irracionales.