El 26 de enero del 2016, los vecinos del barrio El Progreso de Villa Hayes realizaron un macabro hallazgo. En un patio baldío, dentro de un bolso estaba el cuerpo de una mujer, desmembrado, sin la cabeza ni los órganos internos. La Policía lo identifico posteriormente: se trataba de los restos de Cinthia Carolina Escobar, de 30 años, madre de tres hijos (en ese entonces de 2, 7 y 11 años), quien se encontraba desaparecida.
Las sospechas de la familia se dirigieron inmediatamente sobre Esteban David Da Silva, expareja de Cinthia, y se iniciaron las investigaciones bajo presiones de todo tipo, según relataron familiares de la víctima. En noviembre del 2017, el cráneo de Cinthia fue hallado en aguas del río Paraguay.
El juzgamiento, que comenzó en Villa Hayes se trasladó a Asunción por motivos de seguridad, y finalmente, ayer, tuvo su veredicto final: una ejemplar condena de 30 años de cárcel para Da Silva, que según el Juzgado, es el autor del terrible crimen sin lugar a dudas.
El juicio terminó entre incidentes, ya que los familiares de Da Silva trataron de agredir a la familia de la víctima. El padre de Cinthia, Pedro Escobar, señaló a C9N tras la sentencia: “Esa condena viene a ser justa de alguna manera, pero para mí esta clase de crímenes deben darle más de 150 años para que no vuelva otra vez a ocurrir en nuestro país”
Por su parte, la hermana mayor, Marta Graciela Escobar, agregó sentirse doblemente dolida, ya que “aparte de estar destrozada (su familia) estamos recibiendo amenaza de la familia (Da Silva) y es triste. Después de pasar por todo este calvario recibimos amenaza”.
De hecho, en un momento, tras culminado el juicio se escuchó a Vicenta González de Da Silva, madre del acusado, decir: “De la misma manera se van a morir porque son todos la misma cosa, sinvergüenzas”. Sobre el fiscal del caso, Jorge Figueredo, dijo: “Al fiscal no le va a durar mucho su felicidad, va a ver lo que le espera (…) es un haragán, no hace su trabajo y no le busca a los que han hecho esto”.
ÚLTIMA VEZ
El 21 de enero del 2016, la víctima fue hasta la casa de Francisco Vera, todavía prófugo, donde se habría encontrado con su ex, quien la golpeó. De ahí, desapareció.
DETENCIÓN
La Policía detuvo a Da Silva una semana después en Pozo Colorado, Chaco paraguayo.
El hombre negó en ese momento ser el autor del crimen.
SU CABEZA
La cabeza de Cinthia Carolina se encontró recién en noviembre del 2017, en el río Paraguay, luego de más de un año de búsqueda e incertidumbre.
QUE DENUNCIEN
Tras conocerse la sentencia, la madre de Cinthia Carolina instó a las mujeres violentadas a “que denuncien, que no dejen impune, que no dejen pasar a esto”.
La defensa de Da Silva va a apelar la sentencia
Darío Caballero, quien fue abogado defensor de Esteban David Da Silva, dijo tras el fallo que van a apelar la sentencia, porque la consideran injusta. Acusó que el tribunal no tuvo en cuenta las pruebas presentadas por la defensa y que el fiscal solo quería condenar a su cliente a toda costa y que hasta “indujo a los testigos a declarar de cierta manera, y los amenazaba si es que decían algo diferente”.
La ofuscada madre de Da Silva, Vicenta González, se sumó al reclamo del abogado defensor y con tono amenazante dijo que el juicio no tenía ni pies ni cabeza.
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