Por primera vez, José Ayala dio detalles de lo que fue el recordado bloque de hechos paranormales. Reconoció que hubo montajes y que tuvo miedo de ser rajado luego del escándalo.

José Ayala usó su cuenta de Twitter para dar una larga explicación y relatar algo que lo sospechábamos desde un principio: el bloque de “Expedientes Insólitos” de “X Fin Sábado” tenía cosas montadas a causa de la adicción al rating.

Recordemos que el bloque que contaba hechos paranormales tuvo su fin luego de que se filtraran audios donde se escuchaba que todo estaba montado con la famosa frase: “Mové la tacuara”.

“Esta es la historia de ‘Expedientes insólitos’. En setiembre del 2012 más o menos les propongo a los chicos hacer un bloque ‘paranormal’, ya que en todos lados había un momento de la ronda que se hablaba de experiencias de ese tipo, y que casi todos la vivimos”, inició José. “Entonces le propongo a mi productor, en ese entonces Marce ‘Mandibulín’, que hagamos eso, y al comienzo era una onda de contar historias y recrearlas. La primera historia fue la de un joven menonita que sufrió de una catalepsia (estado del cuerpo que parecía muerto) y salió en diarios”, continuó el conductor.

José dijo que el bloque daba sus frutos contra su competencia directa: “El Conejo”.

“Sí, ese minuto a minuto viendo cómo subía era casi adictivo, daba gusto ver que algo original funcionaba y estábamos alcanzando a la competencia. ‘Mandibulín’ captó muy bien la esencia del bloque y le dedicó mucho tiempo y se esmeró en mejorar siempre. Después de ese primer caso, ‘Mandibulín’ decidió ir ‘in situ’ a los lugares que se los conocía como embrujados o donde ocurrían cosas sin explicar. El resultado fue increíble, cada vez crecíamos más con los números de audiencia, haciendo algo original y donde toda la familia lo podía ver”, siguió el relato de José, quien dijo que llegó el programa que explotó con todo.

“‘Mandibulín’ fue al Cementerio del Este, ese programa fue una locura, todos hablando y esperando que llegue el momento de la emisión, desde chicos y grandes, periodistas hablando de ese bloque y nos llegan los números, habíamos ganado por primera vez a ‘El Conejo’. Logramos algo impensado, ‘El Conejo’, critiquen o no, es el programa de los sábados que se mantiene hace décadas, con apoyo de marcas y números de audiencia grandes, por eso, te guste o no, al César lo que es del César, mis respetos a Palo y equipo, mantenerse es lo difícil y ellos lo hacen”, le bajó José.

MALDITO MINUTO A MINUTO. Pero luego de haber logrado ganar en rating a su competencia, cometieron un gran error que le costó caro. “Ganamos al ‘Conejo’, y con el concurso de cachaca piru crecimos aún más, comenzábamos con el concurso bien popular, para luego terminar con los expedientes, fue una fórmula mágica. Y así lo fue por meses enteros, disfrutábamos y nos divertíamos llegando a las casas de la gente. Perooooo el maldito minuto a minuto, que te decía que estábamos arriba era adictivo, queríamos subir más y más, y no pensamos en lo que se venía. Volvernos locos por el rating fue un error que lo íbamos a pagar”, dijo José.

“Era obvio que había montajes”

“Llegó enero del 2013, y en una reunión de producción se les ocurre hacer una ‘experiencia en vivo’. A mí no me gustó para nada la idea, y les dije que no me parecía, que era muy arriesgado porque era obvio que habían montajes, y ahí quiero decirles algo. Cierto, montábamos muchas cosas (la famosa silla que se movía sola y otros) pero había cosas que no nos explicábamos, como la sombra de un motoqueiro, o sonidos que de verdad no hacía falta poner en edición, daba miedo en serio”, contó, hasta que llegó el sábado con la historia del Pombéro en vivo. “El programa salió redondo, y salió supercreíble y realizado de forma fantástica por la producción, terminamos el programa y comenzamos a recibir uno que otro tuit ‘que joda’, ‘son unos impostores…’ No le dimos mucha importancia, pero al día siguiente explotó todo con la filtración del audio”, contó José Ayala.

Creyó que lo iban a rajar del Canal

“Llegó la hecatombe, vi el video, sí, ya habían hecho un video con los audios del corte. Me llegan mensajes de todo tipo, ninguno lindo o chúlina, amenazas hasta de muerte y pidiendo la cabeza de todos los integrantes del programa, reunión de emergencia ya en el Canal ese domingo al mediodía”, dijo José, pero la cosa no terminó ahí. “Los directivos del Canal nos dan el apoyo y nos dicen que no nos van a echar. Respiré, y nos dijeron que nos mantuviéramos en silencio. Yo me moría por pedir ya disculpas y aceptar el error. Llegó el sábado, pedimos disculpas al aire, y el show continuó, seguíamos siendo líderes en audiencia, pero algo había cambiado. Ya aprendimos una lección: no ser esclavos del rating, ni del maldito minuto a minuto, y desde ese día me prometí usar la TV para influir positivamente”, terminó contando José Ayala.