Una comitiva encabeza por la fiscala Sandra Ledesma, de Luque, dio el pitazo final a un torneo clandé de piquiboli que se estaba jugando en una quinta ubicada en la compañía Pindolo, de Areguá, con presencia de montón de gente, chupi ere eréa. El local pertenece a la familia del pelotero e ídolo olimpista Richart Martín Báez.
Pe igustové jave cayó al lugar la gente del Ministerio Público y demoró tanto a Richart Báez como a otras 50 personas que se encontraban en el sitio disputando el torneo karape. La fiscala Ledesma constató avei que en el local se estaban ingiriendo bebidas alcohólicas en abundancia porque seguramente ijuhei los jugadorkuéra luego del esfuerzo. La causa de la detención de todo el “plantel” sería entonces por la supuesta violación de la cuarentena, según explicó la representante del Ministerio Público.
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